Primer Congreso Constituyente

42 PRIMER CONGRESO CONSTITUYENTE cerca del Gobierno de la Gran Bretaña, se le llamase al Congreso para que concurriese á las sesiones, mientras verificaba su viaje, pues sus luces eran necesarias como las de Jos demas señores que se ha– llaban en Jos demas Estados independientes de Ameríca, á quienes se había llamado de orden de la Represcntacion Nacional por el con– ducto de la Secretaría. Se resolvió conforme á la mocion del Sr. Ferreyros. En seguida se leyó un oficio del Director provisional de Moneda Don Cayetano Vídaurre, en el que e>.'Pone al Congreso ha– ber remitido doce monedas nuevamente acuñadas para que las inspec– cionase la Representacion Nacional, y el estado en que se hallaban los trabajos de la Casa de Moneda despues de Ja destruccion por el ejercito enemigo. Se resolvió que se contestase al Ciudadano Vidau– rre, que el Congreso había oído con agrado su exposicion, y que en vista de Ja moneda, el Congreso esperaba de su patriotismo y de– seo por la felicidad de la República, continuase empeñandose cada día mas y mas en la conclusion de un establecimiento de tanta im– portancia al Estado. El Sr. Argote con este motivo hizo presente al Congreso que te– nía noticia de que existía en Chile un sujeto de grandes conoci– mientos y capaz de contribuir con ellos a la formacion de cui'íos y demas utiles de la Casa de Moneda. Se mandó al Sr. Argotc hi– ciese una exposicion por escrito sobre este particular y todo lo re– lativo a él, que estimase oportuno. Se continuó la discusion de la Constitucion, y leído el artículo sesenta, designado para la cliscusion de este día, no se sancionó por ser base jurada. Se leyó el artículo sesenta y uno. El Sr. Ofelan observó que había una confusion entre este artículo y el cincuenta y cinco, ya moderado. El Sr. Carrion esplicó atinadamente el cspirítu de ambos artículos. Se declaró discutido, se votó y fué aprobado. Se leyeron los artículos sesenta y dos, y sesenta y tres, y fueron votados y aprobados sin discusion. Se leyó el artículo sesenta y cuatro, se votó y aprobo sin discu– sion. El Sr. Mariátegui hizo la siguiente adicion "Que concurran á la discusion de toda ley los Secretarios del Poder ejecutivo, y el del Senado conservador". Se le contestó por el Sr. Carrion, que esto era de Reglamento, y que la Constitucion no debía ser reglamentaria. Se votó la adicion, y fué desechada. Se leyeron, votaron y aprobaron sin discucion los artículos sesenta y cinco, sesenta y seis, sesenta y siete, sesenta y ocho, sesenta y nuc– " ~e.· y., setenta. " •' . ..., • • :l ·

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