Antología de la Independencia del Perú

ANTOLOGIA 631 les. Pensemos que Egaña funda la Biblioteca Nacional. A la vez, Ra– món Briceño lo llamaría "el patriarca" de la independencia política de Chile. Educación y Política básicas forja, pues, Egaña. Y lo com– pleta solicitando también la reunión de un Congreso General de Re– presentantes de América. A ello añade su talento literario ya expre– sado en Lima en múltiples ocasiones y que se patentiza en Chile con la producción teatral que ha estudiado -así como su biografía- Gui– llermo Ugarte Chamorro. Un ensayista como Mario Góngora -cita– do precisamente por Ugarte- llama a Egaña justamente: "discípulo de la Ilustración Peruana, radicado en Chile". 4. Hace 150 años, el 9 de octubre de 1820, Guayaquil juraba la Independencia. El capitán-comandante Gregario Escobedo había sublevado a la Guarnición de Guayaquil; y proclamada la Independen– cia había enviado, en calidad de prisioneros, a las autoridades esp~ño– las, hasta Huaura, donde ya se encontraba San Martín. Mil quinientos hombres entre oficiales y soldados, se aprestaron a combatir por la In– dependencia al mando del oficial peruano. Mientras tanto se ·formaba una Junta de Gobierno integrada por Olmedo, Jiménez y Roca. Los tres vendrían a Lima, cuando Guayaquil fue anexada a la Gran Co– lombia, después de la Batalla de Pichincha. Pero su posición de "inde– pend1entes" responde al criterio de la sober·anía de cada pueblo por te– ner un gobierno propio que exprese su voluntad, pero unificado a un gran gobierno general americano. 5. Pero este hecho que nos pone en contacto con la "acción" después de haber visto mayormente la "idea" de la Independencia, también tiene primeros ejecutantes peruanos y precisamente en el la- · do del Sur, de donde procedía el General San Martín. fueron jóve– nes peruanos: los Luzuriaga y los Alvarez Thomas, integrantes de la acción del 25 de mayo de 1810, que abrió las pu~rtas de la Independen– cia Argentina. Ya Toribio Luzuriaga e Ignacio Alvarez Thomas ha– bían participado en la defensa de Montevideo contra las fuerzas ingle– sas y expresado su posición americanista. Fue Ignacio Alvarez Thomas, posteriormente, una figura relevante de los hechos de la Independen– cia. Nacido en Arequipa en febrero de 1787, ya figura entre los miem– bros del Regimiento de Milicias de Lima, como cadete, en 1795, se– gún afirma Alberto Tauro . Y más tarde será llevado por su padre, funcionario español, a España y a Buenos Aires, donde continúa la ca– rrera de las armas. Heroicamente herido en Montevideo, su nombre ha– brá de sonar en la defensa de Liniers y, posteriormente, como Gober– nador de Santa Fe para ser considerado "Benemérito a la Patria". Su actuación en la Revolución de las Fuentezuelas lo llevará a ser el Director Supremo del Estado de las Provincias Unidas de la Plata. Su proclama es brillante. Su pensamiento: republicano, frente a las tendencias monárquicas de buscar un príncipe español para regir el nuevo ·Estado. "Proclamar la Independencia Absoluta" es su lema. Hay que destacar hechos trascendentales que ponen a un peruano a la cc.1beza de la que habrá de ser la gran expedición libertadora de Chile y del Perú. El Gobernador de Cuyo, General José de San Mar– tín, que abrigaba el plan de ayudar a la causa de la Independencia de Chile, ve en el Director Supremo del Estado, no sólo a un aceptan-

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