Asuntos Militares el Ejército Libertador del Perú

396 EJ~RCITO LIBERTADOR DEL PERO' rro, se formaron cada uno de ellos en masa, y dispersando a su frente algunas compañías de tiradores, se abanzaron sobre nuestras colum– nas. Inmediatamente mandó el Gral. cargar un Esquadrón de Gra– naderos sobre los tiradores y la columna derecha de los enemigos, mientras qe nuestras masas marchaban de frente; pero el Exquadrón tubo .Ja desgracia de qe fuese herido su Comandante y comensó a des.filar pr. la izquierda como a treinta pazos del enemigo. En este estado se dispersó nuestra ala derecha, compuesta de los Batallones del Río de la Plata, pr. la aproximación de las masas ene– migas y pr. el fuego de sus tiradores y a nuestro centro e izquierda {3e mando suspender la carga y qe retrogradasen a tomar la altura de nuestra retaguardia, como lo berificaron en medio de un fuego orroroso. En esta última posición se defendieron hasta donde pudie– ron, y tubieron qe seder el campo al mayor número, pues por todos pu~tos se bieron atacados de fuerzas muy .superiores qe no era po– sible resistir, estando ya desecha nuestra ala derecha. Se dio pr. punto [Fs. 344] de reunión al puerto de Ilo, en donde se han juntado las reliquias del Exto. El enemigo no nos persiguió más qe unas sinco leguas, y en varios choques qe se ofrecieron en es– ta retirada, siempre nuestras tropas se abrieron paso. Embarcado el Exto. en Ilo se mandó venir a Pisco y tubimos la desgracia qe se perdieran en la costa el Transporte Truxillana en qe benía el Regimiento de Granaderos a Caballo y el Dardo en qe venía el N 9 5 de ChHe; ningún hombre a perecido ahogado; pero mucha gente se ha extrabiado pr. haver salido en una costa enemiga y en medio de una trabesía de 18 leguas qe tenían qe pasar p11- llegar a Pisco. La pérdida p 0 • nuestra parte entre pricioneros y muertos no ba– xa de seiscientos hombres, cuarenta y tantos oficiales, y tres piesas de Artillería. Como mi principal objeto en esta parte es contraerme al Exto. de Chile debo exponer a V.S. qe en la acción de Moquegua y en Torata s·e han comportado nuestras Tropas de un modo brillant-e. Jamás han abandonado el campo de batalla, aun cuan [Fs. 344 vta.] do se han visto cargados pr. fuerzas superiores hasta qe han resivido la orden del Gral. Pª hacerlo. No remito el Estado de nuestra pérdida p.rqe aún no se ha in– corporado el NQ 5; luego qe lo verifique remitiré a V.S. un Estado de los Oficiales y Tropa muerta y pricionera. Es mi deber recomendar a V.S. la comportación del Sr Coront del n. 4 Dn José Sant 0 Sánchez; El Tente. cornl Dn Pedro José Reyes y la de todos los oficiales de este Batallón qe en ambas acciones se le presentaron ocaciones de distinguirse pr. su bravura. Cuando remita el Estado acompañaré las notas de los qe han sobre salido más.

RkJQdWJsaXNoZXIy MjgwMjMx