Asuntos militares: juntas de guerra (1820-1821)

62 GRAL. EP FELIPE DE LA BARRA (57) ORDEN AL COMANDANTE MILITAR DE LURIN: AVISANDO– LE LA VENIDA DE LOS PARLAMENTARIOS Y ENCARGANDO– LE LES TENGA LISTO UN DEQENTE ALOJAMIENTO CON CA- MAS Y DEMAS NECESARIO, ETC. El señor Marqués de Valle Umbroso remitirá a Vuestra Se– ñoría dos Parlamentarios .que envía desde Pisco el General enemi– go y vendrán ya caminando. Inmediatamente que reciba Vuestra Señoría éste, les dispondrá un alojamiento en Pachacamac con todo el aseo y decencia posible en su , ajuar y camas introducién– dolos en él sin que por ningún título entren en ese Pueblo, y aun así hará Vuestra Señoría que caminen con los ojos vendados des– de que lleguen a los límites de su jurisdicción y se haga cargo de ellos. En dicho alojamiento deberán permanecer hasta nueva or– den mía, que comunicaré en vista del aviso de su arribo; y en el entre tanto les ministrará Vuestra Señoría diariamente una comi– da fina y abundante haciendo que se les asista con el mayor esme– ro y consideración; pero sin permitirles más comunicaciones que las que sean necesarias para este objeto, y aún sobre él deberá Vuestra Señoría adoptar las más prolixas precauciones: debiendo Vuestra Señoría llevar una razón formal de los gastos que abona– rá la Hacienda Nacional.== Va a marchar una partida de 20 hom– bres con un Oficial para que se haga cargo del servicio cerca de ellos y provea a su seguridad.== Dios, etc. Lima, 20 de Septiem– bre de 1820.== Joaquín de la Pezuela.== Señor Coronel don An– tonio María Pardo. (58) OFICIO DEL VIRREY AL COMANDANTE MILITAR DE LURIN SOBRE VIGILANCIA A LOS DIPUTADOS DE SAN MARTIN. Consequente a lo que dixe a Vuestra Señoría en mi oficio de esta mañana, marcha el Alférez de "Dragones de la Unión" don Ma– nuel Raya con un sargento, dos cabos y 18 hombres del mismo todos montados para que hagan la guardia a los Diputados que envía el General del Exército de Chile don José de San Martín en el Pueblo de Pachacamac en que han de permanecer sin comuni– cación con nadie, pero sí, con aquel desahogo interior en la casa y huerta, si acaso tiene, que sea compatible con su comisión y buen