Asuntos militares: juntas de guerra (1820-1821)

JUNTAS DE GUERRA 79 bien de todo el camino y desfiladeros que median desde Lurín a dicho Pueblo y Puerto.== Tenga Vuestra Señoría anticipados aloja– miento para ambos Escuadrones que tienen de fuerza 200 hom– bres, e igual número de caballos cada uno, para dicho Gefe O'Rei– lly; el Comandante de "Húsares", cuatro Capitanes y doce subal– ternos, así como víveres y pastos que pagarán sus correspondientes precios.== Dios guarde a Vuestra Señoría muchos años. Lima, 23 de Septiembre de 1820.== Joaquín de la Pezuela.- Señor Coro– nel D. Antonio María Pardo. Nota : Se transcribió con la misma fecha al Señor Brigadier D. Diego O'Reilly. (76) INSTRUCCION QUE HA DE OBSERVAR EL SEÑOR BRIGA– DIER O'REILLY EN EL PUNTO DE LURIN A QUE VA DESTI– NADO CON LOS ESQUADRONES DE HUSARES Y CARABAYLLO. Instrucción etc. : - 1? Saldrá en el próximo día 25 Lunes pa– ra Lurín con el 2? Esquadrón de Húsares y otro de Carabayllo, montados, armados y municionados.== 2? Acantonará ambos Es– quadrones en el Pueblo citado de Lurín, y se ocuparán en la ins– trucción sin otro servicio, especialmente el de Carabayllo que es– tá atrasado en ella.== 3? En tal disposición se mantendrá este Gefe y procurará que adelante el Esquadrón de Carabayllo todo lo posible hasta ponerse en estado de batirse, interín se hallan suspensas las hostilidades durante la negociación entablada con los Enemigos.== 4? Por si se rompieren las hostilidades, en cu– yo caso el Señor O'Reilly ha de obrar con ambos Esquadrones, y otras tropas si conviene aumentarlas, observará y reconocerá to– do el camino que hay desde Lurín a Chilca y Puerto de Pucusa– na, deteniéndose en el de Caracoles (que llaman) y está antes de dicho Puerto, para sacar de su localidad el mejor partido posible, y detener a los Enemigos en él, quanto se pueda y aun en el Puer– to mismo.== 5? Reconocerá asimismo, otro punto que hay siete leguas más allá de dicho Pueblo de Chilca que llaman el mal pa– so. Este es un desfiladero que forma una larga montaña de are– na bajando al mar, de manera que no deja en su orilla anchura para más que dos o tres hombres de frente. La montaña de Are– na tiene un Portillo en su altura por donde con trabajo se puede subir, y pasar dos hombres de frente sobre una gruesa y pesada