Conspiraciones y rebeliones en el siglo XIX: la revolución de Huánuco, Panatahuas y Huamalíes de 1812

34 ELLA DUNBAR TEMPLE ventajas adquiridas sobre los insurgentes de Buenos Aires capita– neados por el traidor Diez Velez, recomendando al mismo tiempo al valor pericia y entusiasmo de las tropas de la vanguardia al man– do del Cor-onel Don Francisco Picoaga á quien fundandose en los importantes anteriores y actuales servicios concedió á nombre de S. M. el grado de brigadier interino de que se juzgó acrehedor, es– perando la superior aprobación de V. A. Que desde entonces, no ha recibido noticias oficiales del escrito, por haber interceptado la comunicación los cochabambinos, que en cuanto vieron alejarse las tropas Reales se armaron en varios grupos no siendo bastante á disciparlos . los destacamentos que se hayan en la circunferencia pues aunque algunas veces son batidos se reacen y afligen á los pue– blos y caminantes indefensos que su mayor conflicto es los crédi– tos gastos que ocasionan estas turbulencias, habiendo agotado to– dos los recursos sin ingreso alguno, ni modo de proporcionarlo, por la extinción del tributo y falta de comercio: que estos se han aumen– tado con la reciente novedad que ocurrió en veintitres del último fe– brero en Huanuco á donde sublebados de improviso, se introdujeron los Indios Panataguas y aunque al principio juzgó no era cosa de la mayor entidad dictó sin embargo las providencias que creyó opor- ' tunas, teniendo que aumentarlas despues por los recelos vehementes que se tenía de que se intentaba propagar esta sublebación no solo á Huanuco sino á los partidos inmediatos de Huamalíes Conchucos y Caxatambo de la Intenencia de Tarma como se los aviso Goberna– dor Intendente Don José Gonzales de Prada, á quien envió inme– diatamente una expedición de seiscientos infantes armados de fusil, 150 lanzas cien de caballería con pistolas y espadas; cuatro cañones de montaña y las correspondientes municiones, con tan felix éxito que batió y disipó á los insurgentes de Huanuco apoderandose de la Capital y huyendo á los montes las reliquias. Que para sujetar á los Huamalies y <lemas hizo salir del mismo Huánuco ciento cin– cuenta hombres y otros tantos del cerro de Paseo, para que ata– candolos en diferentes puntos les obligasen á entrar en su deber á cuyo fin les adelantó un indulto general, pero que sin esperarlos ba– rias parcialidades pidieron perdon, por lo que cree que antes de mu– chos días estará todo apaciguado, sin embargo de los muchos male– volos que procuran esparcir por todas partes la insobordinación y alboroto, que han sido tan copiosas las lluvias en el Perú que han emprendido las operaciones del ejercito, pero que debiendo ya con– cluir, dá la orden, para que con todas las fuerzas disponibles se ataje á los Cochabambinos escarmentandolos para castigo suyo y exemplo de los <lemas provincia, cuya operación consegu.ida como es de es– perar, marchará la vanguardia al mando de Picoaga ó apoderarse

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