Conspiraciones y rebeliones en el siglo XIX: la revolución del Cuzco de 1814
'• 500 MANUEL Jl!SUS APARICIO VEGA rino, en el día de su fecha, doy fe. Ante mí. Francisco Javier de Li– nares (Rúbrica). Luego, yo el Escribano pasé a la cárcel; y encontrando en él notifiqué, e hice saber el tal auto, según, y como en él se manda al reo Manuel Santayana, en su persona, que lo oyó y entendió; cs– t<indo presente el Teniente del Alguacil Mayor y Alcalde Mauricio Delgado; doy fe.- Linares (Rúbrica). Luego yo el Escribano cité con el tal auto, para lo que en él se manda al Abogado Fiscal en su persona. Y lo firmó; doy fe.- Doctor José María Barriga (Rú– brica).- Linares (Rúbrica). A las cuatro de la tarde de hoy, catorce de abril busqué al de– fensor a efecto de hacerle saber el tal auto, en su casa de la callle abajo de Santa Teresa; y me contestó un negrito que estaba dur– miendo. Y para que conste pongo la presente. Linares (Rúbrica). Luego yo el Escribano notifiqué é hice saber el tal auto según y como en él manda al procurador de pobres Toribio Aguilar en su persona que lo oyó y entendió y lo firmó; doy fe. Toribio Aguilar (Rúbrica). Linares (Rúbrica).- Luego, Yo el Escribano notifiqué el tal auto al Defensor en su persona: y lo firmó; doy fe.- Doctor Ureta (Rúbrica).- Linares (Rúbrica). Al margen.- (ilegible).- El Escribano Rivera.- Certifico, doy fe, que ahora poco más de quince días al tiempo de hacer ante el señor Teniente Asesor y para ante mí su ratificación el reo Pe– dro José Calatayud en la declaración que Je había tomado el Alcal– de de Coporaque como a derrotado del ejército insurgente de Pu– macahua, y contando cómo había sido la derrota, expuso que él tu– vo ánimo de pasarse a nuestro ejército Real pero no lo hizo temero– so de ahogarse en el río de aquel lugar donde fue la acción; en el cual perecieron muchísimos indios, aun oficiales de dicho ejérci– to insurgente, y entre ellos un zambo oficial limeño muy catingo llamado Faustino Barreto que fue el que en dicha acción de Can– gallo del día diez de noviembre último apresó al señor Goberna– dor Intenden te don José Gabriel Moscoso como el mismo zambo lo decía siempre públicamente y también Jo expresaba mucha parte de la tropa: Y en esta inteligencia el señor Teniente Asesor me man– dó tuviese esto presente por lo que fuese conveniente en la causa del actual suplicante. Es cuanto puedo, y debo certificar en cum-
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