Conspiraciones y rebeliones en el siglo XIX: la revolución del Cuzco de 1814

528 MANUEL JESUS APARICIO VEGA afirmó y ratificó, siéndole leída esta su declaración; y no le tocan las generales de la ley; y lo firmó con su Señoría por ante mí, de que doy fe.- Marluel Maristaya Almonte (Rúbrica).- Tristán (Rú– brica).- José Nazario de Rivera (Rúbrica). Inmediatamente compareció don Julián Añasco, de quien su Señoría por ante mí le recibió juramento que lo hizo por Dios Nuestro Señor, y una señal de Cruz, so cuyo cargo, ofreció decir verdad de lo que supiere, y fuere preguntado, y siendo acerca del manejo y operaciones de Julián Salas; dijo que siempre conoció, y comunicó a Julián Salas en Lampa como que el declarante estaba allí hacendado, y también dicho Salas hasta ahora tres años que se vjno a esta ciudad, el declarante que estando aquel tiempo tuvo por hombre honrado a dicho Salas, como que trabajaba con bue– na conducta de trajinante a varias partes con sus mulas que tiene de carga; que después lo vio acá una que otra ocasión que había venido a ese su comercio; que entre los Lampeños que vinieron con el ejército insurgente del Cusco no vio a Salas, ni ha oído decir que se haya introducido con los Revolucionarios, ni que haya cometido algún delito que malquiste su buen concepto de hombre de bien; que esta es Ja verdad en cargo del juramento hecho, en que se afir– mó y ratificó siéndole leída esta su declaración, que es de edad de más de cuarenta años, que no le tocan las generales de la ley, y la firmó con su Señoría, por ante mí de que doy fo.- Julián de Añas– co (Rúbrica).- Tristán (Rúbrica). José Nazario de Rivera (Rúbrica). Incontinenti de orden de su Señoría solicité a don Esteban Pa– checo para que comparezca a evacuar su cita como testigo designa– do por Julián Salas, y me hizo presente hallarse pues enfermo, por Jo que no le era posible pasar al Juzgado, y para que conste le pon– go por diligencia, y de ello aoy fe.- Rivera (Rúbrica). Arequipa y marzo tres de mil ochocientos quince.- Vista la anterior diligencia dase comisión al presente Escribano para que reciba la declaración del Capitán don Esteban Pacheco. Dos rúbri– cas.- Ante mí. José Nazario de Rivera. En la ciudad de Arequipa en el mismo día, mes y año pasó a las casas conocidas del Capitán don Esteban Pacheco de quien en uso de las comisión que me está conferida le recibí juramento que lo hizo en forma Militar so cuyo cargo ofreció decir verdad de lo que supiese, y fuese preguntado, y siéndolo por la conducta de Ju-