Conspiraciones y rebeliones en el siglo XIX: la revolución del Cuzco de 1814

.~ ,;. LA REVOLUCION DEL CUZCO DE 1814 41 ocurren a V. A. haciendp presente que cuando el ambicioso pro– cura labrar suerte con la ruina del inocente, cuando la impuni– dad y la cobardía ejerceq las funciones del furor y del resentimien– to y cuando el ~goísta desea destruir el equilibrio del orden, la in– justicia no conoce límites el hombre de probidad recela justamente de las asechanzas de asesino y el edificio social se desmorona a pasos agigantados. Tal es el cuadro que presenta esta fidelísima Ciudad sumergida en el olvido: algunas de las Autoridades togadas que la deben su existencia y decoro abusando indebidam~nte quie– ren colocarla en la esfera de infidente en cambio de ponerse a cu– bierto de su ingratitud y su machiavelismo desconocen la multi– tud de sacrificios que sus entusiasmados habitantes han cometido en justo obsequio de la buena causa: influyen al poderoso e inti· midan al miserable para ·que con su condescendencia y servilidad suscriban a cuanto les sugiere su capricho: connaturalizados con la adoración e inciensos que exigen de estos mbradores le hacen vivir en la inacción y en la apatía: cuando éstos quieren reclamar con alguna firmeza de carácter los derechos que la sabia y benéfica Constitución política de la Monarquía les prodiga procuran aque– llas deidades denigrarles con el negro título de insubordinados so– berbios y tumultuarios: Ensimismado Vuestro Regente Don Ma– nual Pardo funda su orgullo y engreimiento en que todos los hom· bres le aplaudan y adulen servilmente: Su opinión ha peligrado ciertamente en la época de la convuh¡ión y su egoísmo es el ver– dadero garante de las presentes circunstancias: el monstruoso e in– grato Don Manuel Vidaurre se ha dejado conocer por los pape– les apócrifos y seductivos que ha dado a luz con el simulado tí– tulo de la Concordia y su vergonzoso manejo en nada desmiente de los sentimientos que ha manifestado en er estado de embria– guez y enajenamiento. Todos los abusos y excesos que falsamente se experimentan en esta tranquila Ciudad deberían desaparecer hasta de la memo– ria de los hombres si el enérgico y entonado Jefe estuviera a la Cabeza del mando, pero la bondad e ineptitud de Vuestro Presi– dente Accidental el Brigadier Don Mateo García Pumacahua uni· das al ascendiente y dominio que sobre él tienen los Ministros y señaladamente el criminal Escribano de Gobierno Don Agustín Chacón y Becerra hacen que aquí no se conozcan más que el atro– pellamiento la rivalidad y la impostura cabalmente se han experi– mentado en estos días todos aquellos vicios caracterizados con el sello de la verdadera intriga al abrigo de asonada y tumulto se ha formado el más ilegal y monstruoso proceso contra dos Abo- " '.

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