El teatro en la independencia
366 GUILLERMO UGARTE CHAMORRO ROL. Hazlo siempre ganará tiempo Alonso. ELV. ¿Y si me libro con este puñal? (muestra una daga.) ROL. Clávalo en mi corazon; y aun así, con la mano convul~ siva de la muerte, te sujetaré. ELV. ¡Suéltame! te doi mi palabra de que ni llamaré a la guardia, ni le haré seguir. ROL. Fio en tu palabra. (suelta a Elvira). Hai en tus ojos tanta sensibilidad, que estoi seguro de que tienes un alma noble. ELV. ¿Cómo te llamas? habla con libertad; el centinela se ha retirado por mi órden mas allá de la última puerta. ROL. Me llamo Rola. ELV. ¡El jefe de los peruanos! ROL. Eralo ayer; hoi cautivo soi del español. ELV. ¿Y te ha movido a esta accion tu amista! por Alonso? ROL. Alonso es mi amigo, y pronto estoi a morir por él: pero otro móvil me ha impulsado, mas fuerte que la amistad. ELV. Tan solo otra pasion puede inspirar tal exceso de jene· rosa temeridad. ROL. Y esa es ... ELV. ¿El amor? ROL. Sí. ELV. ¡Animoso y sínc ro Rola! Sáb t qu aquí el mismo objeto que a tí; y si yo hubi amigo .. . ROL. ¡Qué!. . . ¿hai muj r dotada d dulzura no sea Cora.? a mí m sal ad traia tu
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy MjgwMjMx