Historia de la emancipación del Perú: el protectorado

634 CERMAN tÉGUIA y MART1NBZ "Adición.- Una docena de cohetes que tiraré antes de la expi– ración del término, convencerá a V.E. de que tengo el poder que afirmo, aunque a éstos se les dará una dirección inofensiva.- Luis Benito Benet, secretario". (9) VII Cierto que los cohetes en que fincábanse el orgullo y la arro– gancia de Cochrane, habrían causado verdaderos estragos en el sitio de Copenhague y en la guerra de Francia contra Argelia; pero tam– bién lo era que sus terribles consecuencias habían semifracasado en el sitio de Boulogne (1806) y en la batalla de Waterloo (1815). Los ~spañoles sabían ésto, y -no cabe duda- interrogábanse sobre la eficacia de aquella arma, en manos de la novel escuadra patriota, por más veterano, experto y notable que fuese su almirante, gran conocedor de aquel medio supremo de hostilidad. En verdad que, si cohetes perfectamente elaborados en el viejo continente, ha– bían frustrado su energía y resultados en las grandes guerras napo– leónicas, más racional sería aguardar que los muy flamantes fabri– cados en Santiago de Chile por artífices de segundo o tercer orden, no obtuvieran mayor éxito. Muy posible es también que los opera– rios de la terrible máquina guerrera, que, según vimos, eran pri– sioneros españoles, hubieran participado a los altos funcionarios del Perú los defe~tos que, de propósito, y, si malévola, patriótica– mente, habían ellos impreso en la fabricación. Unidas a todo ello, esa inagotable altivez y aquella inquebran– table fortaleza invívitas en el carácter de nuestros dominadores, ins– piraron a Pezuela la siguiente c0ntestación. "Señor comandante de las fuerzas navales de Chile.- Recibo, a la una y media del día, el oficio de Ud. de fecha de hoy; e, impues– to de su contenido, debo decirle que un desafío como el que me hace carece de ejemplar. Los resultados sobre la suerte de los inte– reses pacíficos que en él se amenazan, si por ventura llegaren a realizarse, serán de la responsabilidad del autor de la criminal agre– sión.- Dios guar<le a Ud. muchos años.- Lima, 29 de setiembre de 1819.- Joaquín die la Pezuela" (10). No contento con esta seca y elativa respuesta, el virrey, después de firmarla ceñudamente, cogió la pluma 1 y, de su propio puño, (9) Apud Bulnes, incompleta, op. et vol. cit., págs. 308 y 309. Mendiburu (completa), t VI, pág 327. (10) Bulnes, loe, cit, pág. 309. Mendiburu, id., pág. 327.