Historia de la emancipación del Perú: el protectorado
674 GERMAN LEGUIA y MARTINEZ IX Mar afuera todavía, traslada las tropas y marinería de la almi– ranta al bergantín y a la goleta. La marejada es espantosa Las on– das se debaten como fiera herida en las ansias de la muerte. Coch– rane trasbórdase también a la goleta y pone en ella su insignia de almirante. El estado de debilidad de Miller es tal, que, al preten– der abordar la cubierta de la "Montezuma" cogiéndose de las me– sas de guarnición, en instantes en que el oleaje aparta el bote donde afirma los tremulantes pies, queda en vilo a punto de caer y de ahogarse, incapaz ya de sostenerse. El brazo hercúleo de Cochrane mantiénelo en alto sobre el abismo, y al fin le arrastra y deja in– cólume sobre el elevado puente. La "O'Higgins', al cuidado de un oficial y unos cuantos hombres de mar, es dejada allí para que no se exponga a las furias de la costanera resaca, más procelosa que nunca; y a fin de no despertar, con esa embarcación de guerra y mayor porte, las suspicacias de sus enemigos del puerto. Queda, pues, la maltrecha almiranta fuera de vista. El resto de la escua– drilla improvisada se desliza en sentido sur, y va en pos de tierra. Lo hace, sigilosa, hacia el extremo meridional de la punta, en momentos en que va a ponerse el sol; y recala frente a la caleta o desembarcadero denominado "Aguada de los ingleses". La intención del temerario lord es tomar tierra en la noche; pero la calma sobreviniente burla semejante propósito. Aplázase, de ese modo, un ataque que ha podido efectuarse más fácilmente y mejor en alas de las sombras y de la sorpresa ... Ese ataque se hará el 3. X Es la temible e inexpugnable plaza fuerte de Valdivia algo así como una estrella cuadrígona irregular, formada por el río del mis– mo nombre en su desembocadura sobre el océano. Las puntas de esa estrella son: al O. el cauce prjndpal del Valdivia, río caudaloso y navegable (por vapores de hasta mil toneladas), constituído por multitud de riachuelos secundarios, como el Futa, el Cruces. y el Callecalle, y en cuyas riberas se alza, al fondo, la ciudad de Valdivia, a unas catorce millas de la costa; al S.E., el canal de Gallones, que, con el cauce principal anterior, delínea la hermosa y grande isla interior llamada "del Rey"; al S. la larga y oblonga bahía de San Juan; Y al N., el canal "de entrada", con una latitud máxima de una
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