Historia de la emancipación del Perú: el protectorado

254 CERMAN LECU!A Y MARTINEZ tín, a pesar de la sinceridad con que le ofrecí ponerme bajo sus órdenes con todas las fuerzas de que yo disponía". "Si algún servicio tiene que agradecerme la América, es el de mi retirada de Lima; paso que, no sólo comprometía mi honor y reputación, sino que me era tanto más sensible, cuanto que cono– cía que, con las fuerzas reunidas de Colombia, la guerra de la in– dependencia hubiera sido terminada en todo el año 23" (11) ... XII Sin hacer gran caso de las piezas hasta aquí recordadas, dig– nas de señalada preferencia, como que algunas son oficiales, y to– das auténticas; los historiadores venezolanos, colombianos y ecuatorianos, cada vez que han relatado, estudiado y c;omentado la célebre en trevista, ha n continuado y continúan empecinados en invocar y citar determinado artículo, escrito en Nueva York, y allí publicado en 1851, por el general colombiano don Tomás Ci– vriano Mosquera; personaje que estuvo en Guayaquil en julio de 1822, en la calidad de ed,ecán (como O'Leary y Torres) del Pre– sidente de Colombia; y a rtículo, dice Mitre, "vaciado después en las Memorias del propio general [Mosquera] pero en el cual in– curre éste en los dos más groseros errores cronológicos puestos en boca de San Martín y de Bolívar, como si el autor hubiese es– tado presente a la conferencia" (12). No parece sino que Mosquera, ese indigno mistificador de he– chos y documentos, cuyo nombre se halla tristemente unido a una escandalosa suplantación diplomática (13), hubiese, desde 1822 (11) La Opinión Nacional de Lima de iS de marzo de !878, donde esta carta pubEcóse por primera vez; Revista Peruana, vol. II, año de 1879, pág. 41; y Ateneo de Lima, 2• época, vol. III, afio 1821, núm. IS, pág. 222 (12) Op. cit., vol. III, pág. 627. (13) La del supuesto documento conocido, en las disputas de limites perú-colombiana y perú-ecuatoriana, con la denominación ele "protocolo Pe– demonte.Mosquera" presentado, en copia de copia, al real árbitro español, y rechazado perentoria, absoluta, victoriosamente por el Perú, en virtud de razones tan contundentes como éstas: !• la de no existir, ni en el arch ivo de la Cancillería del Perú, ni en el de la de Colombia, ejemplar alguno ele tal protocolo, cuyo original duplicado no han podido presentar los contra. <lictores de nuestro derecho; 2• el hecho de que el 11 de agosto de 1830, fecha del protocolo, Mosquera ya no estaba en el Perú; circunstancia que este Estado ha demostrado exhibiendo: a. un oficio de Mosquera, del 24 de julio del mismo año, en que ese plenipotenciario se despide del gobierno de Lima;