Historia de la emancipación del Perú: el protectorado

70 GERMAN LEGUJA Y MARTINEZ XXVIII Urdaneta y Febres Cordero no escaparon, por su parte a la in– gratitud guayaquileña. El primero, aniquilado en Huachi (22 de noviembre) y, por eso, mal recibido por la nueva Junta, y el segundo, desde mucho antes, disgustado de las disposiciones de ésta, viniéronse también al Perú y en él militaron a las órdenes de San Martín. Ya hemos visto a Febres encargado de la comandancia gene– ral de las guerrillas peruanas; y a su hermano Joaquín, venido con él, nombrado gobernador de Cajamarca, en los momentos ál– gidos de la reacción realista y de la contrarreacción patriota de la provincia de Mainas (58). nera que el pueblo clamaba, y clama aún, contra un exceso indigno de un caballero, de un americano y de un ministro de la libertad.- Se decía, a voces, que no era el amor a Ja Patria ni a la independencia, lo que le había hecho tomar una parte activa en Ja transformación de este país; y sí sólo la sed de atesorar, la ambición de mando y el ansia de salir del estado mi– serable a que lo había reducido su conducta anterior.- Acosado el Gobierno por todas partes, quería siempre proceder con moderación y templar los ánimos; pero todas las medidas eran inútiles; y, como la exaltación podía causar un extravío difícil de contener, fue indispensable proceder a su arres– to, para consultar su propia seguridad, y resolver su remisión, etc.".- Des– truge, op. cit., págs. 208 y 209. (58) "Un tartufo, de aquellos que abundan, pasado el peligro de una revolución", llegó a decir, en presencia de Villamil, que "las manos que ha– bían hecho la de 9 de octubre de 1820 debían ser besadas primero y cortadas después"... Rese1ia cit., del propio Villamil, págs. 16 y 17.- Diremos, para acabar este capítulo que la Escobedo (o Alcance), una vez caído el exjefc del Granaderos de Reserva del Perú, cambió su segundo nombre por el de Patria, que conservó hasta su pérdida por varamicnto y naufragio en la costa de Chupaderos de afuera, viniendo en viaje a los puertos libres de nuestra Re– pública.

RkJQdWJsaXNoZXIy MjgwMjMx