La expedición libertadora

403 casualidad en todo este tiempo) no ha salido buque de aquí para parte alguna, ni he tenido yo suficiente plata para mandarlo so– bre todo el mundo, y dar esta importante noticia con la antela– ción más precisa . Bajo de estas disposiciones me dirijo al dicho pueblo de Supe, a los dos o cuatro días de que salga esta fragata con la satisfac– ción de que V.E. apoyará esta mi deliberación, y aquel orden de mandar papeles, en circunstancias de quererme morir; a no ha– berlo así ejecutado, considerando que ni V.E. ni el Estado acaso, tendrán noticia de dichas fragatas. Tengo el honor, con este motivo, de reasegurar a V.E. mis profundos respetos, como el que apetezco determine de mi inu– tilidad; no habiendo para mi gloria más alta que servir a V.E. y por V.E. a mi patria de quien le soy su obligado. Dios guarde a V.E. muchos años para felicidad de la Amé– rica. Capital de Lima, 11 de marzo de 1820. Remigio Silva. P. D. - Tenga V.E. la satisfacción de que se me han entre– gado por varios patriotas de esta ciudad cuatrocientos pesos por vía de donativos para la expedición, los que no mandándolos por la duda de ser entregados. caminan conmigo o para presentárse– los a V.E.. o determinarlos arreglado a la comisión que obtengo para objetos útiles de la misma expedición, lo que espero sea de la aprobación de V.E. Si hubiera tenido yo alguna correspondencia, esté V. E. cierto que hubieran caminado conmigo cien mil pesos. DASM.- VII.- 169-73