La expedición libertadora

28 OFICIO RESERVADO DE SAN MARTIN A DON BERNARDO O'HIGGINS PIDIENDOLE LE CONTESTE SI EL GOBIERNO DE CHILE PUEDE Ó NO PROPORCIONARLE LOS ELEMENTOS PE- DIDOS PARA LA EXPEDICION AL PERU. (300) Excelentísimo Supremo Director del Estado de Chile. Excelentísimo señor: No podría responder a la confianza que V. E. ha hecho ponien– do el ejército de este Estado bajo mi mando. Yo soy responsable a V. E. y a la nación chilena de mis operaciones. Los ojos de la América, o por mejor decir los del mundo, están pendientes so– bre la decisión de la presente contienda con los españoles, con respecto a la expedición del Alto Perú. Todos aguardan sus resul– tados y saben que el General San Martín es quien está nombrado para decidirlo. Tengo de hablar a V. E. como un caballero, porque conozco lo es por todos títulos, así como lo hago al Gobierno de las Provincias Unidas con igual fecha: ante la causa de la América está mi honor; yo no tendré patria sin él y no puedo sacrificar un dón tan precioso por cuanto existe en la tierra: hablo a V. E. con el mayor respeto pero con la franqueza que en mi actuación estoy seguro lo haría V.E. En 31 de julio último pasé a V. E. una nota desde Mendoza, de los artículos necesarios para una expedi– ción contra el Alto Perú: hasta ahora no ha podido realizarse sino en muy cortos artículos, como son alguna parte de municiones. alguna parte de armamento, las tiendas de campaña y algunos pi– cos, azadas y palas. Estoy penetrando de las escaseces que afligen al Estado y de que V. E. hace todos los esfuerzos imaginables pa– ra remediarlos, pero ésto no salva mi responsabilidad pública. Tengo dicho a V. E. que para esperar un suceso favorable de la expedición se necesitan 6100 hombres; V. E. tiene a la vista el estado de fuerza del presente mes del ejército unido. Supuesta co– mo creo la feliz terminación de la campaña de Concepción, nece– sita aquella provincia una guarnición para establecer el orden en ella, guarnecer a Talcahuano, la frontera y contener a los indios. La provincia de Coquimbo, Valparaíso y esta capital les son necesa– rias alguna fuerza para mantener el respeto y apagar las facciones de los díscolos: V.E. podrá calcular el número preciso y decirme con qué fuerzas disponibles puedo contar para el plan acordado

RkJQdWJsaXNoZXIy MjgwMjMx