La expedición libertadora

412 los ha de imprimir cuando está muy satisfecho que los papeles lejos de influir hacen desesperar a los hombres, por no traer mas de solo comprometimientos y sacrificios en valde? por último se retira la Escuadra de dicho Santa (9) traen mas de 20 entre prisioneros y pasados, y a unos y a otros ponen presos existiendo así hasta el día: estos confiesan aun el menor paso que la Escua– dra ha pensado dar; esto es no queda cosa que no declaran, aun desde que vino la primera vez, lo que ha dado méríto para opri– mir mas y mas a Riva Agüero, y a ser llamado yo y otros por ban– dos, sin saber en que vendrá a parar todo esto. Poco después se noticia ir la Escuadra para abajo, por lo que ya no queda ni una pequeña señal de consuelo. ¡Y con toda esta inacción, estos acon- (9) Todos volvieron a creer que se había ido la Escuadra a Chile, a traer la expedición, por fin pues ya no había embarazo de buques de Es· paña; pero se vuelve a engañar, porque a poco se sabe que en la Punada de Guayaquil, por una rareza, tomó aquella dos buques con madera y un poco de plata, mientras que de aquí salieron varios, y entre ellos com? millón y medio de pesos, y parte de estos para comprar y traer doce mil fusiles que se esperan dentro de uno o dos meses, cuya cantidad se hu· biera tomado con alguna disposición. La vez pasada, al otro día que se re· tiró la Escuadra, entró la Mariana de España con un millón de pesos en efectos, también el bergantín inglés Macedonia que descargó por Chillór, mas de medio millón; esto fué estando aquella bloqueando como también dos mas lo ejecutaron del mismo modo por Huacho, y por Ancón otros y tantos. ¿ Y no es dolor que se pierdan hacer tantas presas sin duda algu· na; que importarían dos o cuatro millones solo en descuidarse por no te– ner lo principal, y sobre todo !o primero que es uno, dos o mas espías con fondos diferentes capaces de que por falta de dinero no se deje de hacer lo que fuese preciso? Con diez mil pesos que tuviera, supongo para gastos, podría darse al estado millones de noticias que interesan más a la Escua· dra en el acto, y todos los días por tocias partes y como se quier.., porque la plata Jo mueve todo; porque hiciera garantías gigantes, a lo que se agre– ga que con ellas se agotarían las entradas a este comercio. y al erario prin· cipalmente, que ha sacado de derechos hasta la fecha, en estos tres meses que está por esta vez Ja Escuadra, cerca de un millón de pesos en entra· das y salidas. ¿No es un desconsuelo y no dá cólera también al ver que to– dos los contrarios aquí, hagan zumba, chacota y mofa del decantado blo– queo! Ya he hablado de la división ligera que debía de estar siempre so– bre e~te punto para que nadie entrare y saliese, y el incauto fuese toma– do. Cuando por infinitísima desgracia (que Dios no lo permita, porque si sucede así se verán las resultas) no viniese tropa de pronto, y sea oreciso venga la Escuadra otra vez a bloquear, porque es de creer que habiéndola no esté allí sin objeto útil; en este caso, (en el que se esperan ríos de san· gre de parte a parte por ciarse tiemoo; mientras que hov no hay que te– n:ier suce.da eso oor nuestra parte) juzgan todos que se tomarán providen· c1as, estando la Escuadra bloqueando, para que se destinen uno o dos ber· gantines muy ligeros para que existan entre Pisco y Chilca y otros, o cerca de la isla de Masorca o dentro de Huarmey, Santa y Huacho; puntos fiios en los que tocan los buques que quieren entrar al Callao, para verificarlo sin ries¡;0. Con espías que aun debían haber en las costas, tendría ese E5· tado las i:nás evidentes noticias, bien organizadas y no de poco mas o men0s, como qmzás tendrá de uno que otro oue lo hace como quiere v gusta: v con estos estarán satisfechos allá. La Escuadra las tendría también todos !~s dí~s para dirigirse. tomar buques. y libertarse de un asalto casual. qve 01en Pudo y puede haber. no siendo bien tener en todo una confianza cier,:1, atendiendo al valor y fuerza solamente. ·

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