La expedición libertadora

423 su independencia, será el que lo contradiga: quiero decir en el mismo momento, aunque hayan los cuidados que hayan por allá, pues ninguno ha de ser tan positivo como este que amaga siem– pre, si esto está por el Rey, y si se dá un poco de tiempo. En dos palabras; se hace evidente esto: si Buenos Aires fuese casuafmen– te perdido; como puede serlo con el tiempo; en el todo era per– dido, si no tenía por suyo esto; mas si Buenos Aires fuese perdi– do, teniendo al Perú por suyo, en muy poco tiempo había de ser– vir. ¡Verdad es esta incontrastable, que nadie es posible la nie– gue! Luego tanto o mas debe de cuidarse la conquista del' Perú (19] que aun el mismo Buenos Aires: luego debe de sacarse tro– pas de esas mismas líneas para remitirlas al Perú incontinenti; luego debe verificarse esto, sin perder un solo acto, un solo ins– tante, un solo momento; y luego a no hacerlo así es querer expo– nerse a perderlo todo. Queda probado este capítulo: paso hacer lo mismo con el siguiente, y con él los pasados y todos juntos. Punto quinto. Es verdad, que no admite réplica, que si Buenos Aires, Chile y el Perú estuvieran aliados y unidos, no tendrían que temer a nadie, porque asistido cada uno por sí y entre todos tres, y par– ticularmente el primero por los dos, respecto de estar mas ex– puesto, le sobrarían buques, tropas, y cuanto les fuese preciso .pa– ra conservarse no solo a si mismo, sino también para ayudar a las otras Américas. y aun para expedicionar sobre España, si aca– so así pareciese. Siendo esto así; ¿no es un fuerte dolor que cuan– do hoy es tan fácil no se haya hasta el día logrado; queriéndose exponer con esto a que todo sea perdido? Una comparación, ~on nuestra suerte infeliz, en el día va a aclarar esta alternativa; Bue– nos Aires sin Lima, está expuesto a varios golpes; Buenos Aires con el no esperaría ninguno; Buenos Aires sin Lima tiene convul– ciones, traiciones y acometimientos de revolución en lo interior; Buenos Aires con él nada le sucedería; Buenos Aires síno gana tiempo en hacerse de Lima, está sumamente expuesto a ser arrui– nado en el todo; Buenos Aires con él, nada temería; Buenos Aires por no tener al Perú que es la cabeza, o medio cuerpo; n~ es re– conocido por independiente por las naciones, pero ni aun por su [19] Dispénseme la expresión de conquista, lo mismo se haría con 8 mil hombre que con la mitad según antes se ha dicho, pues la diferencia es que si tardaría en rendirse esto en dos meses se haría en cuatro: se deduce que 3 6 4 mil hombres no harían mucha falta a los dos Estados' para defenderse, y se consultaba todo.