La expedición libertadora
472 días de haber desembarcado, ·en cuyo tiempo el mismo buque u otro de la escuadra estará prevenido para recibir la correspon– dencia. El pescador deberá izar al acercarse una banderita blan– ca, y dar la voz de viva la patria; 25? La correspondencia debe venir numerada, guardando el orden cada comisionado con la suya, por si acaso se separan y se ven obligados a obrar en distintos puntos. Además Ja convenien– cia de los números consiste en que si se extravia algún papel sir– va el sólo número o para referencia o para tomar alguna medida relativa al extravío; 26? Los comisionados pueden escribir o con la cifra del li– brito que se les ha dado o por medio de las cortaduras del pape~ que se acompaña. Cualquiera de los dos métodos es seguro y pro– pio para cosas breves e importántes. Pero si hay mucho que es– cribir se usaría del líquido Nitrato de Bismuth con una pluma nueva, el cual puede obtenerse en cualquier botica bien provista. En caso de que se escriba con este líquido se pondrá una cruz de tinta negra en el encabezamiento de la carta; si se escribe por me– dio de las cortaduras del papel se pondrá un borrón negro en el encabezamiento, y en fin, si se usa del librito la misma cosa lo ha· rá conocer formando una especie de cuenta de pesos, reales y me– dios, indicando el número !? la página. el 2? el renglón y el 3? las palabras que se toman como medio de inteligencia; 27? Nunca deben esperar correspondencia mía o de mi se– cretario sino por el mismo conductor de Ja suya si fuese nece– sario: pero para todo caso estarán con sus firmas y se les escri– birá con los nombres figurados, a saber: a Paredes el de Casio, y a García Mario; 28? Como Lima es una ciudad populosa donde siempre ha habido y hay acceso de forasteros es más fácil estar en ella oculto que en cualquier otro punto de campaña o lugarejo donde la cu– riosidad y novelería siempre hacen fijar la atención sobre la cara y pasos de un hombre nuevo. Pero si por algún acontecimientO' se vieren en la necesidad de ausentarse de la capital dejarán a algunos amigos encargados de hacer las comunicaciones que for– man el objeto primero de estas instrucciones. Para tal evento es– tarán siempre bien preparados y no consen •arán jamás en su per– sona papel alguno cuya pérdida o sorpresa pueda ser sensible; 29? El mejor uso que pueden hacer de los amigos de la cau– sa, y principalmente de aquellos para quienes llevan correspon– dencia se1·á valerse de sus resortes para adquirir seguras noticias,
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