La iglesia: la acción del clero

LA ACCION DEL CLERO En esta Corte del Perú en trece de Octubre de mil ochocientos y veinte y uno, para la información mandada recibir por parte del Doctor Don Santiago Ofelan, Vicario de Tarma compareció ante el Señor Hur– tado, vocal de la Junta Eclesiástica de Purificación, el Capitán de la Pa– tria Don José Casimiro Arrieta quien con licencia de su Xefe, hecha la señal de la Cruz y con la mano puesta en su espada prometió decir verdad en cuanto fuese preguntado; y al tenor dixo: que conocía a dicho Doctor' Ofe– lan de trato íntimo el espacio de cinco años; que siempre le ha conocido por patriota, y sindicado él y su familia por el gobierno anterior: que le consta ha mantenido por unas semanas, y de su peculio el hospital del Cerro, formado de resultas del convate de las tropas de la Patria: que ha apoyado las emigraciones que se emprendían de las banderas del rey: así lo declaró y firmó baxo de juramento de que certifico. José Casimiro Arrieta.- (Rúbrica).- Cuéllar. Número 1<? Señor Cura Doctor Don Santiago Ofolan. Su casa, Setiembre 6 de 1821. Muy Señor mío y Amigo de todo mi aprecio: Quedo enterado en la carta de usted de 5 del corriente a que con– testo diciéndole, que aunque es -notorio el modo de pensar de usted, que siempre se manüestó afecto a nuestra causa y libertad, yo puedo con ma– yor motivo que otros exponer que me consta de su patriotismo. Toda la población del Cerro fué testigo de que usted, a pesar de hallarse enfermo y retirado en el pueblo de Caxamarquilla anexo de su Doctrina, se presentó inmediatamente al Señor Arenales a rendir su obediencia y omenages de respeto sin haber hecho otro tanto con el gefe Orrely (sic) que mandaba a los Españoles. También es comprovante de su buen modo de pensar en orden al concepto que tenía formado del pundonor y religiosidad de las tropas de la Patria, que aunque insistieron algunos preocupados en que se despojasen la Iglesia del Cerro de la Plata labrada, Usted se opuso con firmeza a ello alegando que no se persuadiesen de que fuesen capases aquellas tropas de utenta:r en lo menor contra el respeto de los templos.