La poesía de la emancipación
LA POESIA DE LA EMANCIPACION Aun guerreros sin número cubría el pabellon de España; hasta que al fin los nobles descendientes del Cid y del Pelayo; los valientes, que con invicta hazaña, del Agareno un día las fuertes medias-lunas abatieron: los que á Cartago y Roma en desigual contienda resistieron en Sagunto y Numancia: los que en Bailen vencieron y en Pavía y en San Quintin las huestes de la Francia: esos héroes volaron á Ayacucho y al peruano rindieron sus laureles. Allí fijó la libertad sus aras ... ¡La Libertad!. . . tus vivos resplandores hoy por la vez primera atonitos miramos; hoy á nuestros inicuos opresores por conservarla esterminar juramos ... Guardemos tan sagrado juramento: ella por siempre nuestro númen sea. Y si quizá otro déspota insolente darnos de nuevo esclavitud desea; sírvale de escarmiento ver que clavado en la rendida frente de la fiera española, el estandarte del Perú tremola. Felipe Pardo ("Lelio" ). 543 (Lima patriótica del Perú. Lima, Imp. de D. Fernando Velarde, 1853. 45 - 47.-)
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