La rebelión de Túpac Amaru
LA REBELION DE TUPAC AMARU 317 El espediente número 72 manifiesta el concurso hecho por los sugetos que en el se comprenden, sobre la propiedad de los sebos secuestrados en la casa de Cavildo de pueblo de Tinta de los que substrajo el infame traidor José Gabriel y como acreedores se die– ron a don Bernardo de La Madrid, a Don Miguel de Velasco, a Don Luis Astete y a Don Nicolás Beato Asegurado del Castillo, los que manifiesta sus expedientes comprendidos en los que se acompañan de deboluciones N? 1, Nc:> 55, N'? 60 y No. 36. De los enunciados sebos recogidos en dicho pueblo de Tinta y conducidos que fueron a esta ciudad viendo que al año y seis me– ses de hallarse depositados, no aclaraban el derecho de propriedad, los individuos que manifiesta el indicado expediente de concurso y que dichos sebos se iban perdiendo con el rancio y que de continuo se iban comprando de cuenta de la Real ;Hazienda para el alumbro de quarteles; atendiendo pues a que los interesados no perdieren el todo de su valor si se demoraba más tiempo sobre el exclarecimien– to de su propiedad como ha sucedido hasta la fecha, tuve por com– beniente se comprasen y pagasen para aquel fin a razón de diez pe– sos quintal, dos pesos menos del valor a que se vendía en plaza el de buena calidad, en que ni la Real Hazienda padeció quebranto, sin embargo de hallarse algo enmojecido y rancio, ni sus interesados por lo que se hace esta advertencia, por si en algún tiempo se excla– rece a quien pertenece respectivamente el referido sebo. como tam– vién que su venta consta del expediente N? 64 a foja 2 buelta. En las demás especies que se han vendido, se ha observado las sencillas diligencias que manifiestan, según el orden prevenido en las que se hallan al principio de dicho inventario que se acompaña. Es advertencia que las 19 partidas que constan de los inventa– rios de foja 14 a foja 15, abrazadas con llaves y señaladas con cruz al margen se entregaron al señor Don Juan Manuel Campero, de orden verbal del difunto señor Inspector General en el mismo acto de estarse formando los inventarios a la puerta de la tienda de di– cho señor Inspector General, quando se descargaron ]as cargas refe– ridas cargas que trajo a Langui el señor Valcárcel, según se tiene dicho y aunque era consequente haver dado recivo de ellas el men– cionado señor Campero ofreció darlo después y como de parte suia ni de la mía, no se acordó esta diligencia he dado por falla dichas es– pecies entregadas por no tener constancia que acredite la referida devolución de ellas. De orden verbal del señor Inspector se entregó en el campo de Tinta al infame traidor José Gabriel, un baso de plata, una basenica de idem y un mate de lo mismo, cuias especies no se volvieron a
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