La rebelión de Túpac Amaru

LA REBELION DE TUPAC AMARU 329 Condorcanqui, a sus sequaces, que recibió en depocito mi parte Digo, que a consequencia del Superior Decreto de 23 de Diciembre del año pasado, proveido por el Señor Visitador Superintendente General de Real Hazienda, se sirbió Vuestra Señoría mandar por el de 8 de Enero de este año, que se me hiziesen saber los reparos que ofresen los setenta y sinco expedientes presentados en esta ra– zón, según el informe que en su virtud y reconocimiento a produ– cido el Contador de resultas Don Miguel de Salví, para que los con– teste en el devido modo en cuyo cumplimiento y de la Provincia de 25 de Febrero del año corriente expondré lo siguiente. Los reparos del contador son en substancia tres. El primero, se reduce a que mi parte instruya cuenta y razón particular de la en– trada y salida de los bienes embargados al Licenciado Don J osef Maruri Cura de la doctrina de Asillo, para que así pueda practicar– se el debido cotejo en su certificación de esta cuenta nunca la con– cideró mi parte como incidente de la general de Depocitos, por eso, aunque en el expediente número 62 hizo relación de los bienes per– tenecientes a dicho cura, no tuvo por conveniente instruir alli cuenta formal de ellos, reserbando hazerlo por separado, para consultar de este modo la maior claridad. Assi lo ha echo en efecto haviendo remitido ultimamente a la Superintendencia General. El relativo a la Cuenta de los bienes de dicho cura se halla oy en la mesa del contador de Resultas Don Miguel de Salvi a quien se dirijió por Vuestra Señoría para su examen y reconocimiento. Bajo de este con– septo deviendo conciderarse del todo inconexo con la quenta general de que se trata, parece no hay inconveniente para que esta se fini– quite. El segundo reparo rueda sobre el abono que mi parte se hace de 274 pesos 1 real 17 maravedises que pago a Don José de Picoaga, por el valor de dos medianos y quatro platillos de plata con peso de 35 marcos y 2 onzas que se perdieron de la Plata Labrada que en maior cantidad prestó para el servicio del Señor Don 1 Josef Antonio de Areche quando estubo en dicha ciudad, respecto de no justificar dicho abono, con el orden superior que que debió preseder para el pago. Mi parte verificó en virtud de un papel que por presentación de dicho Señor le escribió el Señor Don Fernando Saabedra Conta– dor en aquel tiempo de visita, para que de los caudales de Depósitos se hiciese la satisfacción de las indicadas Piezas. Es conforme que el referido Señor Saabedra, como encargado especielmente del go– bierno interior, y económico huviese hecho este cargo al Señor Are– che Datandose de la partida en los mismos caudales que manejó de Su Señoría desde la salida de esta Capital a la expresada ciudad y