La rebelión de Túpac Amaru: antecedentes

482 LA VERDAD DESNUDA ción tenían en el manejo de la Provincia, y que lejos de haber agra– viado a Túpac Amaru eran, como el Corregidor, acreedores suyos de dinero y de beneficios. Mantiénenlos en prisión sobre seis días, y después de haber saqueado sus casas hacen sufrir la muerte más violenta al primero, y dejan en esclavitud a los otros. Hay cartas que aseguran que Túpac Amaru despachó propio al Cuzco el día de la prisión de Vuestro Corregidor, y otro el mismo en que le qui– tó la vida, pero ambos con mucho sigilo y precaución. 45.-Estas circunstancias, Señor, son de mucho comento, y me– recen una seria consideración, como también la de no haber damni– ficado Túpac Amaru a ningún eclesiástico, sino a Don José Ramón de Vergara (Cura de Tinta, europeo y muy amigo del Corregidor (17), que si no huye precipitadamente al Cuzco hubiera experimen– tado la misma desgraciada suerte. Y la de no haber intentado el Doctrinero de Tungasuca Don Antonio López de Sosa durante seis días que estuvo allí preso Don Antonio de Arriaga, o recabar con Túpac Amaru la libertad de su vida, o avisar sigilosamente al Cuz– co el grave peligro en que se hallaba, mediante no distar aquella ciudad más de diez y ocho leguas de Tungasuca. 46.-0tra reflexión: ya se dijo que el Corregidor había inter– ceptado los pliegos de la Curia Eclesiástica, en que se dirigeron las escandalosas providencias libradas para el entredicho general, de– cretado injustamente por el Provisor contra el Pueblo de Copora– que, y que había ofrecido a vuestro Virrey remitírselas originales en el siguiente correo. No es dudable que también lo infiriesen así los enemigos del Corregidor, y conociendo que si llegaban aquí unos documentos tan auténticos de su desarreglado modo de pensar, se había de descubrir todo el fondo de su malicia, es de presumir tra– tasen de impedir el envío, y lo consiguieron arbitrando el execra– ble medio relacionado. Persuádelo: lo primero, la circunstancia de haber sucedido la tragedia ocho días antes de salir el correo del Cuz– co para esta Capital. Y lo segundo que en el saqueo de los bienes del Corregidor la primera diligencia fué apoderarse del archivo y cuantos papeles tenía en casa, según públicamente se dice. 47.-De todos los antecedentes apuntados se infieren claramen– te los autores de la alevosamente tragedia perpetrada en Don An-- (17) El Cura de Tinta, Vergara, aunque tenía obligación de ser uno d~ los má:S fieles amigos de Arriaga por los distinguidos favores que le hizo; h.a. sido ~u decla~9;dO enemi.go porque_ sirvió de testigo en la clande~tina, v1c1osa, mformac1on que hizo el Senor Obispo contra Don Antoruo de Arriaga, después de muerto, declarando en ella a contemplación de Su Ilustrísima cuanto quiso.

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