La rebelión de Túpac Amaru: la rebelión

136 DOCUMENTOS DE LA REBELIÓN DE TÚPAC AMARU 37. 1780-1-11. "Muy Señor mio: El ver manifiestamente los clamores que ha le– vantado el Publico sobre los procedimientos o estatutos nuevos que vuestra merced ha empezado a introducir en orden a exigir derechos de alcabala de los granos de trigo que se venden en esta Ciudad y de la semilla de papas que son el alimento general que usan estas gen– tes, como tambien de la carne muerta que se necesita para el abasto comun, me hace con mucho fundamento recelar que sintiendose opri– midos los animos del Pueblo y de los conductores de tales especies, pueda tal vez convertirse en furor, y ocasionar tales inquietudes que no puedan posteriormente remediarse; y mas cuando es bien notorio que se han repetido distintos pasquines llenos de amenazas manifes– tando estos estar despechados y en estado de atrevidas resoluciones los que han pasado a fijarlos." "Ya se deja entender que respaldados y asociados de otros, que es con natural, hayan concurrido a la faccion sin que para contener– les haya sido suficiente el bando que mandé publicar luego que apa– reció el primer pasquín, prometiendo contribuir de mi peculio qui– nientos pesos al que delatase a su autor o complice, bajo de la pro– mesa de no descubrir su persona; de manera que despues de esto han retirado los propios hechos, siendo al mismo tiempo constante que tarde de la noche se han visto congregados muchos hombres como en numero de cuarenta, girando por algunas calles, lo que hace pre– sumir ser sus designios dirigidos a algun levantamiento o asonada que es en sustancia lo mismo que dan a entender los ya referidos pasquines; por esto reflexionando en que la equidad, la prudencia y los rasgos de benignidad que se dan a entender y manifestar al publico, son los móviles mas eficaces para reducir los animos a la debida subordinacion y separarlos de cualesquier intenciones ex– trañas." "Y que ésto es tanto mas facil de conseguirse en los principios, cuanto dificil y aún cuasi imposible de alcanzarse, llegando a tomar mayor incremento y cuerpo los espíritus alterados y la precipitacion de mal contentos. Me veo precisado de la obligacion que me corres– ponde (por razon de mi empleo, de conservar en paz y en justicia esta Republica, y evitar en tiempo habil los disturbios que amena– zan) a hacer presente a vuestra merced cuanto va expuesto, para que en su inteligencia haya de manejarse con otro temperamento, suspendiendo el exigir los tales derechos hasta ahora no acostum– brados de los predichos comestibles igualmente que del maiz."

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