La rebelión de Túpac Amaru: la rebelión

180 D0~UMENTOS DE· LA REBELIÓN DE TÚPAC ·AMARU quines, porque . he· declarado libres de alcabala en los mantenimien– tos a los sitios en que estan las minas como participe a Vuestra Ex– celencia en carta numero 183". "La prudencia pide pararme en todo, y rogar a Vuestra Exce– lencia que alcap.ce de la justifica~ión del Rey el mas pronto reme_:– dio que ya urge, mudando este Gobierno, incapaz de hacer respe– table el nombre del Soberano y de la Justicia, ni restituir la subor– dinación a su justo estado, aun cuando tuviera fuerzas para ello por la desbaratada conducta con que se ha explicado y explica". "Ha maldecido y maldice, sin reparar en los que le oyen censu– rar, así todo lo que no es ,de su fantasía, cuyo abuso o, mejor dire, osadía y atrevimiento es fuerza que vaya produciendo unas resultas tales. Para prueba de como toma este Gobierno los avisos de im– portancia que debiera recibir con decoro y atención por pasarselos yo, y por remitírselos tan circunstanciados, como lo parecen sin du– da, los que contiene en el numero 11; incluyo a Vuestra Excelencia ·copias del oficio con ·que el número 12, y aunque luego ha tenido la continuación de estas noticias y averiguaciones,· o arrestos de · los malvados en la ciudad del Cuzco por medio de la carta del Oficial Real Don Jose de Andia que va con la copia numero 13; no se la he querido remitir conociendo que mas desprecia que atiende este je– fe io que se. le dice, siendo asi que nunca contemplo al Cuzco ~n ma~ peligro que hoy, y con doble causa estando incurso en la confedera– ciori de tumultos y pasquines muchas de las personas principales, como siempre he pensado, y gritando los reos presos sobre que se les oiga". _ "Del Corregidor que hay alli ho tengo buenas noticias. Su jui– d9 : ha :estado descompuesto en otra ocasion; es de poco pulso, Y en una palabra no · es el sujeto que se requiera para unas circunstan– ·ci-as tan cdticas como se lo di a entender a este Virrey. · El estar todo el Gobierno y toda la oph1ion, trato y conferencia de éste jefe -. púes– ta sobre los nacionales, debe merecer a Su Majestad, si y.o. no me engaño,. una secreta y activa representación; doblemente ·mas n~ce­ s.aria al ver que la continua cuando los pueblos no se contienen en su d.eber y respeto, y cuando se mezclan en pensar asi hasta los que se llaman nobles; pues debo asegurar a Vuestra Excelencia que en cuanto a no pagar lo que deben al fondo público de la Nación, estos son sólo los que mas hablan sin duda, porque tienen de su parte al Virrey, o a sus lados que es lo mismo, supuesto que les alcanza. el propio interes · de no satisfacerlos".