La rebelión de Túpac Amaru: la rebelión

DOCUMENTOS DE LA REBELIÓN DE TÚPAC AMARU 29 en ellas su mérito, hasta que perdida su salud y vista de resultas del continudo trabajo, tuvo que retirarse con licencia, á fin de re– pararla; en cuya comision, en fuerza de sus vivas diligencias, alistó cerca de quinientos marineros, que acomodó en las Embarcaciones armadas en guerra, que fueron muy útiles para el servicio, y no per– donó su zelo diligencia para cumplir exactamente con los encargos que se pusieron á su cuidado. Resulta de los proprios documentos, que á los fines expresa– dos, entregó en la ocasion mas urgente una Embarcacion grande nombrada la Aguila, y dos pequeñas, con una porcion de balas de cañon, de que se carecia en los Reales Almacenes; y aviendo sali– do la primera a conducir artilleria de campaña y otras municiones á Montevideo, fue apresada por los Ingleses despues de un reñido combate contra quatro Embarcaciones enemigas, sin que se la haya satisfecho hasta ahora su valor, ni el de los sueldos, que le corres– pondían, ni otra alguna cantidad, con atencion á los gastos que hizo en su Expediciones ni menos al valor de las Embarcaciones que em– pleó para el Real servicio, sin embargo de las reiteradas instancias, que para ellos hizo en Buenos-ayres. Finalmente se reconoce, que assi en estos, como en los antece– dentes encargos, procedió con honor, desinterés, y amor al Real ser– vicio, acreditando su honradez, portandose con la mayor decencia, y sin dar la mas leve nota en su conducta, como mas por menor pa– rece de los documentos originales, que se han presentado en esta Se– cretaria de la Nueva España, á que me remito. Madrid tres de Mar– zo de mil, setecientos, y setenta, y uno. Concueda con la Relacion que se formó, y queda original en esta misma Secretaria. Madrid en el proprio dia, mes, y año. 1 (AGPM). (fado.) Franco. Xavr. de Villanueva (una rúbrica) 1 Para indemnizarlo de sus pérdidas, recibió nombramiento de Go– bernador de Tucumán. Pasó lueg·o como Corregidor de Tinta, en la pro– vincia de Kanas y Canchis o Tinta en el Cusco. Por sus excesos en la co– branza de tributos, repartos de mercaderías y otros desmanes, además de su extralimitación contra las prerrogativas eclesiásticas, tuvo entredicho con el obispo criollo Juan Manuel de Moscoso y Peralta, siendo excomul– gado por éste. Al levantarse Túpac Amaru (4-XI-1780), apresó a Arriaga en el camino de Yanaoca a Tinta. Juzgado y condenado a la horca, fué ejecutado en la plaza del pueblo de Tungasuca (10-XI-1780) . (C. D. V.).