La rebelión de Túpac Amaru: la rebelión
DOCUMENTOS DE LA REBELIÓN DE TÚPAC AMARU 363 los que hoy pone el enemigo, previniendosele los hospicios corres– pondientes que la actualidad los imposibilita; y finalmente con el arribo de Vuestra Señoría Ilus trísima a Arequipa, tomaría el arbi– trio de embarcarse en uno de los puertos intermedios de Aranta , Quilca o Ilo, que es viaje de ocho dias a Lima; debiendo Vuestra Se– ñoria Ilustrísima estimar estas prevenciones como nacidas de mi amor a su persona, y del deseo de que se logre a tiempo oportuno la ex– pedicion. Por incidencia expongo a Vuestra Señoría Ilustrísima los ulterio– res movimientos del rebelde Tupac Amaro y su poderosa faccion , que en parte instruye el adjunto testimonio de autos, que hace el segundo cuaderno de los que remití a Vuestra Señoría Ilustrisima en el anterior correo; porque desplies de los atentados cometidos en la provincia de Churnbivilcas, y pueblos de Coporaque, Yauri, y Pi– chigua, que sujeto a su dominacion se encamino a la Provincia de Lampa fijando sus tropas en la Raya de Vilcanota, transito preciso para las provincias de arriba y garganta de todo el Reino. Por repetidas diligencias que se han hecho no se ha podido in– dagar lo que ha ejecutado en este sitio, o si ha pasado adelante a acometer a las provincias de Lampa, Azángaro, Carabaya, etc., se– gún lo pens aba, por haberse cogído todos los pasos y veredas que no hay medio para internarse carta, ni expreso, tanto de aquella parte, como de ésta; de esta suerte, nos vemos en un caos de confusiones, no siendo facil deliberar acción alguna por no saberse el estado del enemigo. Las disposiciones que desde alli van dando, y las que su mujer Micaela Bastidas promulga desde el lugar de Tungasuca, seducen mas a los Pueblos, y se producen infaustas noticias de los malignos efec– tos que causan estas diabolicas sugestiones; por ellas se ha movido la Doctrina de Catea de la provincia de Paucartambo, cuyos indios han arruinado varias haciendas cuantiosas, siendo el robo y saco de frutos y ganados su mayor aliciente; y a este ejemplo han salido invadiendo otros muchos pueblos, como son Caycay, Pisac San Sal– vador, Taray, Coya y Calca de la Provincia de este nombre, como tambien los de Colcha, Pílpinto y Accha de la de Paruro, con otros muchos lastimosamente acometidos de tropas de indios que hostili– zaban por todas partes, sin perdonar los caminos en que ejecutan muertes atroces, de que nos vienen frecuentes noticias; y para po– der perpetrar mas a su salvo excesos han cortado los puentes d Quiquijana, Ureos, Caycay , Pisac, Lamay y Calca, y pretenden ha-
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy MjgwMjMx