La universidad: libro XIV de claustros (1780 -1790)

244 (ff. 178v.) CARLOS DANIEL VALCARCEL Juan de Ygartua: no obstante lo qual se ha contradicho aquella solicitud por la parte de la Provincia que en su Escrito de fojas 107 estampó estas palabras. Es cosa ver· daderamente digna de la mayor admiracion que porque esto no se estrañe se exijan unas cuentas, y unos Ymben– tarios que no deben salir del secreto de los Claustros ni franquearse a la puhlicidad de los Tribunales; con lo que parece darse á entender que la insolbencia propuesta ha de ser creida sobre la presisa acercion del interesado 1 lo que ciertamente seria digno de la mayor admiracion aun en lo general del propocito, y por mui especial titulo quan– do se aspira á disolver por aquel medio un contrato im– portante y solenne, de manifiesto interes de esta Real Escuela, y autorisado con los Reales despachos de mer– c~d, y de confirmacion de Su Magestad. Que la presente ya que falta la fixa, y puntual esprecion de partidas sobre que havia de fundarse el calculo, vastan á esta Real Uni– versidad con respecto á la materia que se controvierte, las noticias que nadie ignora por ser de tan patente notorie– dad. Combiene á saver que lexos de que se suspendiese la renta á las Cathedras por escases de los fondos de la Pro– vincia nunca los tuvo mas conciderables, y abundantes que desde aquella fecha á lo que manifiestan las cuentas de los siguientes Provinciales, y los espolios ya indicados, que aunque no se han traido á la vista estan mui á los ojos los depocitos en que por mucha parte concistian los em– barasos que han intervenido para su cobranza, las obras, y fabricas que han costeado, y los demas congruos des– tinos en que se han investido con utilidad de la Provin– cia. Que ésta poco, ó ninguno menoscabo puede haver sufrido con la perdida de los Curatos, pues en lugar de ellos han entrado á sus fondos los productos de la Ha– z1enda de Andaguac y / que en el estado annual de su arrendamiento quisa superan con notable exeso el ramo perdido. Que la espresada Hazienda se puso á cargo del Padre Maestro Fray Mariano Muñas en la cantidad de quatro mil pesos annuales cuyo importe como fixo con– taría el Plar1 de Reforma; pero hallandose (h)oy arren– dada en la de seis mil quinientos pesos, el innegable au· mento que aparece de dos mil, y quinientos es mas que suficiente para completarle á las Cathedras su dotacion, y por conciguiente recarga inutilidad el Padre Provincial