La universidad: libro XIV de claustros (1780 -1790)
64 (ft. 135) CARLOS DANIEL VALCARCEL pensó varias veces á mis Antecesores.Tambienes evidente que elegido el mismo Don Mariano con noticia que se le dio á su Exelencia y su verbal aprobacion ha estado instru– yendose, y trabajando en la Secretaria, concurriendo yo en todos ios Actos publicas, y secretos, sin faltar mas que quando me ha sobrevenido alguna particular dolencia de que no se redimen los Viejos, ni los Mosos. Ygualmente es fuera de duda que no tengo para la subsistencia de una numerosa, y noble familia otros auxilios que los que fran– quean los proventos de la Secretaria, cuya continuacion en mi Nieto hazia mucho consuelo á mi consternado espíritu assi como exitó la piedad de todo el publico y con especial la de este savio Cuerpo. Assi pues no haviendose I instruydo á Nuestro Soberano de tan recomendables y particulares circunstancias, ni teniendolas presentes el Superior Go– vierno es claro que comforme á las Leyes de Castilla é Yn– dias en que ordena qee las Reales Cedulas libradas contra fueros é Estatutos en perjuicio de tercero, y contra dere– cho que tenga adquirido! se obedescan y no se cumplan, <leven suspenderse los efectos del indicado Superior Decre– to é imformarse á Su Exelencia para que tambien lo haga á Su Magestad, de cuya inagotable Real Clemencia no pue– de dudarse que acceda á mis rendidas representaciones. Yo interpondre los devidos recursos, y desde ahora los protexto pero siendo preciso que mediante lo referido, y la contradicción que en toda forma hago á la pocesion que pretende Don Clemente Castellanos se suspenda ésta, executandose el correspondiente Ymforme. A Vuestra Se– ñoría pido y suplico se sirva suspender la execucion del expresado Superior Decreto (de el que desde ahora su– plico) protextando hazerlo eP forma ante el Exelentisimo Señor Virrey é interponer todos los <lemas recursos que haya lugar y hazerle el Ynf~rme que corresponde con Tes– timonio del Claustro en que se nombró á dicho Don Ma– riano Llanos como es de Justicia. Don Bernabe Cortijo de Vibar, Secretario. Y enterados dichos Señores Doctores y Maestros de su contenido mandaron salir fuera al dicho Secretario Don Bernabe Cortijo de Vibar, y haviendo salido, y serra– das las Puertas, comferenciada la matheria entre todos, fueron de parecer unanimes y comformes de que la preten– cion de Don Bernabe era lexitima, y que en su comformi– dad obedeciendo como primero y ante todas cosas obe-
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