Los ideólogos: Cartas americanas

XVIII AI,BERTO TAURO volúmenes que existan, nunca lo he conseguido. Dejo con su rótulo los pape– les correspondientes a este asunto. Vigésima Primera.- Declaro que en la corte de Madrid quedé debiendo a un sastre, no se di diez u once pesos, no sé el nombre, si alguno recla– mase en algún tiempo que se le pague. Vigésima Segunda.- Item declaro que no se le ha pagado al carpintero hermano de don Francisco Arévalo dos alasenitas que hizo para las rincone– ras y dos estantitos que están en mi estudio sobre las cómodas. Vigésima Tercera.- Item declaro que cuando pasé a España tenía en mi poder el año de nueve cuatrocientos pesos que se me habían dado para los gas– tos de la testamentaría de Doña Magdalena Romero. Yo había gastado algo. En el año de mil ochocientos diez y ocho trancé este asunto con una señora que se decía interesada, y se extendió la escritura ante Xaraba, pero no tubo efecto porque no hallé que tenía el poder suficiente para transar. Ruego mu– cho a mis albaceas que hagan este pago de lo mas bién pasado de mis bienes pue~ me aflije sobremanera, y si se contentan con mi rico relox, que se le~ de. Vigésima Cuarta.- Declaro que en mi matrimonio he tenido dose hijos bautizados, de los cuales son existentes, tres el Teniente Coronel don Pedro de Vidaurre, el Capitán reformado don Manuel Hermenegildo Vidaurre, y el doc– tor don Melchor Vidaurre abogado de este Ilustre colegio. De mi hija difun– ta doña Juana Vidaurre, muger legítima del Sr. Dr. don Pedro de la Torre, quedaron dos hijos, dofia Virginia y don Anibal de la Torre y Vidaurre. Fue– ra del matrimonio tengo una niña nombrada doña Manuela Lucía Vidam-re cuya madre es de la misma clase que mi muger legítima, la declaro por mi hija. Vigésima Quinta.- Declaro mis herederos en la forma siguiente. Los tres hijos en partes iguales. los dos nietos en una parte igual a la de los hijos y doña Manuela Lucía en el quinto. Vigésima Sexta.- Dejo toda mi librería a mi hijo don Melchor sujeto a un pliego de comunicatos, que queda en poder de mi confesor el R. P. fray Lázaro Villanueva del orden de San Francisco que corresponde a mi confesión. Vigésima Séptima.- Y para la ejecución de este Testamento dejo como albaceas mancomunados a mi muger doña Francisca Rivera, y don Melchor Vidaurre mi hijo - el pliego de comunicatos lo abrirán presente mi confesor el que se cumpla con su intercesión. Vigésima Octava.- Declaro por mis bienes lo que ~e me debe de sueldo y el producto que deje una impresión general de todas mis obras que procu– rarán mis herederos se haga en Francia en París en la imprenta donde fué impre~o el código eclesiástico que es la mas correcta de mis obras. Se procu– rarán recoger las obras que escribí en Puerto Príncipe de Cuba, que son muchas. Vigésima Nona.- Añado que cuando pasé a Europa el año de mil ocho– cientos treinta desde Buenos Aires se me dieron allí cuenta y cinco onzas por varias personas, con el objeto de que se imprimiese una obra que escriví allí sobre. la última revolución. La entregué en Bourdeaux al señor Coloma para

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