Los ideólogos: Cartas americanas

CARTAS AMERICANAS 533 zas vacantes, parece indispensable que el Supremo Gobierno reemplace a los dos que por ahora no podemos servir. Yo me veo obligado a hacerlo presente a S. E. por el respetable órgano de US., y no dudo que tomará este asunto con el interés que por su entidad merece. Hay individuos que deben ser premiados. Estoy cierto que la elec– ción se hará en personas de conocimientos, probidad y desinterés. La Cor– te Suprema debe ser un modelo de los demás Tribunales, y el más peque– ño defecto sería escandaloso y no digno de disimularse. Esta ocasión me proporciona ofrecer a US. todos mis respetos. Dios guarde a US. Manuel Vidaurre DESPEDIDA EN VISPERAS DE VIAJAR A PANAMA Lima, Mayo 30 de 1825. Señor Juan Santana, Edecán de S. E. el Libertador. Amado señor mío: Cuando la edad me compelía al descanso, yo voy a emprender nuevo viaJe. La patria me manda, yo debo obedecer a la patria. S. E. el Libertador de Colombia y del Perú, ese ángel de la paz y la guerra, de– sea que todas las Américas formen una sola familia. Un Gran Consejo en que se reúnan Plenipotenciarios de las Repúblicas nuevas, fijará las bases de unión perpétua y segura. La justicia entre nosotros y para con los ex– tranjeros, las libertades racionales admitidas por las naciones civilizadas, serán sin duda los grandes objetos que nos ocupen en Panamá. En este establecimiento sepultado en la Grecia, sólo hay de defec– tuoso haberse nombrado a un hombre como yo, muy inferior a empresa de tanto momento. Con todo, trabajaré con mis pocas aptitudes por la fe– licidad de estos nacientes Estados, y en cualquier tiempo o distancia, ten– dré el mayor placer en que U. me mande como a su afectísimo S. S. Q. S. M.B. M Vidaurre. (Adición manuscrita). Hijo mío, ya no verás a tu papá que tanto te ama; yo creo voy a morir en Panamá, ¿qué importa? Mi patri a es libre, la muerte no me es– panta. Mi familia y hermanas mientan a Santana a cada momento y yo le ofrezco mi corazón.