Los ideólogos: Hipólito Unanue

HIPOLITO UNANUE 109 13?- Item: Declaramos, como declaró dicho señor en la cláusula quinta de su memoria, que sólo por una manifiesta protec– ción de Dios pudo conseguir en España se mandase alzar el secuestro de los bienes de Landaburu y se devolvieesen al se– ñor Unanue, como también que reconocieren a un interés moderado los ciento dos mil pesos que había entregado en Caja, en tanto se podían pagar: y que de esa suerte, de una solicitud tan aventurada, pues se dá por perdida, después gastados, no pocos miles y por cuya defensa se expuso a ser comprometido, personalmente, se formó una testamentaría pingüe, que luego los varios susos de la guerra de la Inde– pendencia destruyeron en la mitad o más de su valor.- 14?- Item: Declaramos, como declaró el difunto Señor Unanue, en la cláusula sexta y última de su Memoria, que los expedientes relativos a dicha Testamentaría se síguieron ante el Juez de primera Instancia de esa época, por el oficio del presente Es– cribano· Don Gerónimo Villafuerte y dejaba en su archivo tres tomos titulados Testamentaría de Don Agustín Landaburu Que en el primero se expone y documenta el estado de que– brantos en que entraron a su poder esos bienes y los esfuer– zos que hizo para repararlos e impedir su total ruina. Que en el segundo, están las cuentas presentadas a la autoridad judicial, con su respectiva aprobación en la que el Juzgado le dio gracias por el buen desempeño y legalidad, que en ellas se acreditaba. Que al fin de dicho tomo segundo, está inclu– so un cuaderno de gastos hechos, después de presentada y aprobada la cuenta general, según los que alcanza a la Tes: tam.entaría, en veinte mil pesos y que no había fondos de dónde hacerse pago, por haber suspendido el de réditos de los veinte mil pesos impuestos en el Consulado, que debían haber servido para pagar Jos gastos sucesivos. Que en el ter– cero están los poderes e instrucciones que dejó Landaburu a su apoderado cuando se fue para España, y asimismo un Testimonio de su Memoria Testamentaria, y del testamento que el Señor Unanue otorgó a nombre de Landaburu, con arreglo a su tenor, en virtud del Poder para Testar que le con– firió en esta ciudad, a dos de enero de mil ochocientos, ante el Escribano, Don Santiago Martel.- 15?- Item: Declaramos, como declaró el indicado Señor en la cláu– sula octava de su Memoria, que Don Agustín Landaburu, cuando se embarcó para España, dejó dos hijos naturales Don Juan José y Doña Josefa, en tierna edad, y que cuidó de