Los ideólogos: Hipólito Unanue

114 JORGE ARIAS-SCHREIBER PEZET y tres pesos, con inclusión de ciento quince mil ciento ochen– ta y cinco pesos de principales a censo que las gravaban. Que se remataron en pública subasta, a favor de Don José Zaldí– var, único postor. Que se pagó íntegramente el valor de las tierras y sólo hubo rebaja del tercio en el de los enseres, por lo que logró la Testamentaría el beneficio de más de vein– ticinco mil pesos, pues no habiendo aparecido otro postor, ni ser fácil que lo hubiera en el atraso en que iban cayendo las haciendas de caña por razón de la guerra, podía haberse pro– puesto la rebaja del tercio en todo el valor de ellas. Que el expediente acerca del expresado remate, se actuó ante la au– toridad judicial, por el oficio del presente escribano, en el año de mil ochocientos diecisiete y se declaró en él, que se cubrían sobradamente las dos tercias partes del importe de las haciendas, con la propuesta de Zaldívar, y que este postor decía pertenecer dichas haciendas al señor Unanue, por. haberlas rematado por comisión. Que habiendo tomado ,in– cremento la Guerra de la Independencia después del remate sufrieron las haciendas una ruina con la extracción de los esclavos para soldados, y el destrozo de los cañaverales, ga– nados y tapias lo que a más de ser notorio, constaba por el expediente y documentos inclusos en el libro del remate, de las haciendas, que con mucho trabajo y gastos, se había ido reparándolas y que a más de eso, se habían redimido vein– tiocho mil pesos correspondientes a los Patronatos de Doña María Fernández de Córdova, impuestos por don Antonio Za– vala, en treinta de julio de mil setecientos ochenta, por es– critura otorgada ante el Escribano Don Francisco Luque y a uno de Doña Teresa Rojas, impuesto en veinte de junio de mil ochocientos ocho, por escritura otorgada ante el Escribano Don Santiago Martel, y que el testimonio de esas cancela– ciones quedaban en el libro de remate de la hacienda de San Juan de Arona, etc. Que a más de esto, obtuvo del Gran Ma– riscal Don Bernardo O'Higgins, dueño de la hacienda de Mon– talván, la cesión de las tierras nombradas el Guayabal, por escritura otorgada ante el presente Escribano, en veintisiete de setiembre de mil ochocientos treinta y que era su voluntad quedasen agregadas a la hacienda de Mataratones. Que tam– bién el Director de Beneficencia, había subrogado al señor Unanue en el derecho de cinco mil pesos impuestos al dos por ciento en la hacienda de Herval en el valle de Cañete, pro– pia de Doña Rosa Aliaga, por escritura otorgada en veintiuno