Los ideólogos: Hipólito Unanue

HI POLITO UNANUE 17 Un Autor Patricio, de cuyas aplicaciones ha hecho la Europa el j usto aprecio que se merecen, no honró á la verdad, ni á su Patria en publicar se morían en ella muchos de los que padecian fiebres malignas por el temor y morosidad de sus Profesores en recurrir á la ánchóra sagrada (9) . Convenimos desde luego, que en su práctica no tiene aquella universal precipitacion de que se glorian muchos Clinicos de Europa. Tra tan con lenidad las fiebres benignas, permitiendo algunos paroxismos, porque lexos de que estos arrumen la vida, con las sacudidas que inducen preparan su duración (10) . La a\teracion del frio, y el calor de las fiebres periódicas executan en el cuerpo humano lo que el fuego, y el agua en ciertos sacrificios de los antiguos Romanos : esto es, purificar enteramente las inmundicias, y quizá por esta razon les impusie– ron el propio nombre: Februa Romani díxere piamina Paires . ... Ovid. pero en las malignas que siguen un rumbo contrario ocurren con prontitud y mano liberal. Siempre que reynan epidemias de fiebres pútridas, deben te– merse las de disenterías, y que mutuamente se compliquen; o que mientras unas personas toleran las unas, sufra el resto las otras, segun la diversidad de temperamentos y circunstancias. Hay una gran semejanza entre las causas predisponentes, y ocasionales que engendran ambas epidemias ( 11), ni los humores pútridos pueden mantenerse en Jos órganos destinados á Ja digestión, sin que aumentándose su corr upcion con el calor y la humedad produzcan una acrimonia, que punzando los intesti nos excite con violencia su movimiento peristáltico, y origine una desenteria maligna . De este género han sido las que han reynado en las dos esta– ciones precedentes. Reconociendo una misma causa que las f ie– bres, convenían tambien en muchos síntomas con ellas. Tales eran el hálito hediondo, la lengua puerca, fa tiga de estómago, las, lo executara Ja Sociedad sin usurpar la gloria que fuese debida á sus talentos y dedicacion. (9) Joseph Emanuel de Davalos Doctor Monspeliens. De Morbis Li- mae grassantibuse pag. 21 El Diario Médico de Paris, y el Espir. de los mej. Diarios de Europa elogian esta apreciable obrita. (10) Boerhave aph . 754. (11 ) Pringle: Maladics des Armes c. 6. t; 3. Tisot: Aviso al Pueblo pag. 231.

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