Los ideólogos: Hipólito Unanue

HIPOLITO UNANUE 43 dar por muy satisfechos con tal que le imitara alguno de nuestros ilustrados profesores que gozan de la pública reputación. »Concluiremos, pues, nuestro juicio con decir que es, en ver– dad, muy extraño que, llevando nosotros a los peruanos muchos siglos adelantados en la ilustración y bastantes años en la erección de Cátedras de todas clases, se haya publicado el primer libro de esta clase en Lima y no en Madrid.» En esta segunda edición he procurado corregir, ilustrar y com– pletar mi obra conforme al plan que me propuse para su compo– sición. Mi principal cuidado en ella ha sido estudiar en la natura– leza las cosas de que trato. Las he considerado en sí solas, y después de conocidas, han venido a exonerarlas la memoria y la imaginación, a la manera que el calor de primavera viste de hojas los á rooles desnudos en invierno. Entonces me recordó, la prime– ra, la conformidad de muchas de mis investigaciones con las de los ilustres escritores que cito en su apoyo; dejé que la segunda, exci– tada por la singularidad o por la belleza de los objetos, usase a veces de sus fueros, interponiendo en la narración filosófica las imágenes y descripciones poéticas, teniendo por maes tro a Platón, quien, como observa Longino, lo ejecuta con frecuencia en sus Tratados filosóficos, Lima, 2 abril de 1814. * 611855

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