Los ideólogos: Hipólito Unanue

HIPOLITO UNANUE 835 lo común, de nueva creación. El tribunal por estos medios llegó a ser casi independiente y se vieron en un propio Estado dos Te– sorerías generales, que representaban dos distintos poderes. Por Jos nuevos reglamentos, el Consulado cobra una cuarta parte de los derechos de Aduana para sus gastos, y el sobran te lo remite a la Tesorería general. Empero, mantiene con poca dife– rencia el mismo aparato de empleados y sueldos, que en los tiem– pos an teriores. No ha muchos días que, tratándose de arreglarlo, se mandó examinar su manejo interior; pero pareció más opor– tuno a su excelencia el Fundador, reservar al Congreso el que lo ejecutara. Acaso con gran utilidad del Perú y ahorro de gastos, podría formarse una Cámara reunida de comercio y minas. Precisamen– te, éstas necesitan de los auxilíos que sólo aqu..!l puede propor– cionarles; y él, por su parte, no puede florecer sin Ja explotación de ellas y beneficio de sus metales. Reducido a contencioso el tribunal que se erigió para ade– lantarlas, fué indispensable suprimirlo como inútil y sin relación con su verdadero objeto. Substituyóse un director con el fin de establecer bancos de habilitación y rescate de piña en los asien– tos principales de Paseo, Chota, etc., etc. ada se ha ejecutado, porque el primero está en poder del enemigo y no hay fondos para verificarlo en el segundo. Sin em– bargo, debe ser de los primeros y más importantes pasos del Go– bierno, para abrir de nuevo y con mejores luces las fuen tes fe– cundas que por tres siglos han rendido a la España y naciones europeas más de 2,600 millones de pesos en oro y plata. Ambos metales se han conducido en diferente proporción en los tiempos pasados a las Casas de Moneda de Potosí y Lima, para imponerles el sello, que a fines del siglo anterior tomó su mayor aumen to. La de Lima de 1800 a 1820, acuñó, un año con otro, 4.000,000 y 1/ 2 de pesos. En el de 1821, sólo selló 1.611 ,133 pesos 2 reales. Por consiguiente, ha habido una rebaja de cerca de 3.000,000. Los rendimientos de Ja Casa han sido muy cortos y se ha n consumido en su propio sostén. Verdad es que los españoles, al re– tirarse, barrieron con sus existencias y fondos, y que, con su in– tempestivo regreso en el mes de septiembre, se perdieron, con los caudales conducidos a l puerto del Ancón, los que de nuevo se habían acopiado. La moneda es el signo y monumen to principal del dominio. Increíbles esfuerzos he hecho desde el año an ter ior