Los ideólogos: José María de Pando

CARLOS ORTIZ DE ZEVALLOS PAZ SOLDAN 167 Volviendo ahora al punto en cuestion, ase– guramos á V.S. que no nos hallamos en estado de sentar una opinión en orden a el y todo lo que podemos hacer es indicar las razones que se nos ofrecen en pro y en contra, bajo el su– puesto como se deja entender, de que las con– diciones que se esperase alcanzar de otra plaza fuesen superiores a las que esta presentase. Pu– diera citarse en pro 1 e:> El alta que resultara al credito del Perú cuando se viese a los indivi– duos de una nacion que no babia tenido rela– ciones antecedentes con él; contraerse a su fa– vor en negocios de tal importancia, a pesar de los empeños que le ligan con esta; bien que a nuestro modo de ver, como alguna vez antes lo hemos dicho, el apoyo solido y seguro del cre– dito del Perú para con todo el mundo, estriva casi exclusivamente en el cumplimiento exacto de sus compromisos. 2c:> Que las relaciones fi– nanciales del Perú con cualquier otro estado europeo servirían de fundamento a sus rela– ciones políticas con el mismo, y le darían un interesado mas en el mantenimiento de su in– dependencia de hecho, y en el reconocimiento de la de derecho; aunque ya se sabe que antes de haberse dado ese paso, dos gabinetes él de París y el de Roma cada cual con su objeto han pro– curado persuadir al de Madrid a que escuche la razon. Militan en contra 1? Los zelos que pu– dieran originarse en esta nacion y su Gobierno de que se ocurriese por auxilios a otra parte, donde no se habian hecho las manüestaciones que aqui por la causa de Sur America. 2? El no haber dado hasta ahora un egemplo de esta cla– se ninguna otra seccion americana, todas las cuales han negociado sus emprestitos en Ingla– terra. 3? Que siendo casi indispensable que el Perú mantenga perpetuamente en Europa un agente mercantil en guarda de sus intereses, doblaría sus gastos, situando uno en la Gran