Los ideólogos: José María de Pando

CARWS ORTIZ DE ZEVALLOS PAZ SOLDAN 363 Los sucesos ulteriores son los que han de sugerir a los Esta– dos Aliados aquellas medidas que sean conducentes a asegurar su integridad y la paz de nuestro hemisferio. Sobre el segundo punto de que trata la Nota de V. S. tengo el orden para manifestarle que la insinuación hecha por el Gobier– no de los Estados Unidos del Norte al de Colombia, puede muy bien haber sido sugerida por su recelo de que agregadas las islas de Cuba y Puerto Rico a alguna de las Repúblicas Americanas, ad– quiriese elementos de riqueza y de poder que las pusiesen en apti– tud de tomar mucha preponderancia comercial y política. Mas sea de esto lo que se quiera, mi Gobierno es de sentir que si algu– na Potencia respetable de Europa, se hiciese garante de un tra– tado de paz entre la España y sus antiguas Colonias, fundado so– bre la base del reconocimiento explicito, y desnudo de condicio– nes onerosas de nuestra independencia, no deberíamos poner di– ficultad en acceder de comun acuerdo a que la España conservase la poseción pacifica de las Islas mencionadas. Mi Gobierno se aviene, asi como el de Colombia, a que esta cuestión sea sometida a la Asamblea del Istmo; y por consiguien– te hara sin perdida de tiempo las advertencias oportunas a sus Plenipotenciarios. La contestación dada al Gavinete de Washington coincide com– pletamente con los principios que siempre ha profesado el Gobier– no del Perú con respecto a la futura suerte de los pueblos de Cuba y Puerto Rico. Si las ideas de acomodamiento con el Gavinete de Madrid no se realizasen, y se creyese necesario auxiliarles para que recobrasen su libertad, el Perú cree que es de estricta justicia y de conveniencia comun, poner aquellas Islas en aptitud de eri– girse en Estado independiente; y de adoptar la forma de Gobier– ~10 que les pareciese mas analoga a sus delicadas circunstancias. Creo que esta franca esplicacion sobre los asuntos que V. S. ha tenido la bondad de comunicarme por orden de su Gobierno, llenará suficientemente sus deseos. Mi Gobierno solo desea ma– nifestar en todas ocasiones al de Colombia su amistad fraternal, y caminar de acuerdo en cuanto se dirija a la tranquilidad y a la consolidacion de las Republicas de nuestro Contine!1te. Aprovecho gustoso esta primera ocasion para ofrecer a V. S. los sentimientos de distinguida consideracion con que tengo la honra de protestarme muy atento Servidor. José María de Pando