Los ideólogos: Juan Pablo Viscardo y Guzmán

TRAS LAS HUELLAS DE VrscARno CIX humana ha pervertido el orden natural de las misericordias del Señor sin hablar de la justicia debida a nuestros intereses particulares par~ la defensa dela patria" 1 57. La terminología enciclopedista y revolucionaria, el vago rusonianis– mo -naturaleza, unión social, patria-, apenas recubre aquí la doctrina es'– colástica sobre los derechos naturales inalienables, legítima defensa, etc. La idea de la beatitud original pervertida por el pecado confluye con el mito iluminista del "bon sauvage" que en Viscardo se nutre, según ha reparado Batllori, en las vivencias de su infancia pampacolquina 15 8 • Cuanto puede significar la Carta como testimonio de una ideología política, sUTge patéticamente reunido en los párrafos finales de este alegato tan difundido e influyente durante dos décadas en toda la América españo– la. Aparecen allí los argumentos certeros y las generalizaciones de Las Ca– sas, la reiteración de las doctrinas sobre el buen salvaje y la armonía del género humano, las ventajas del libre cambismo económico y hasta la ape– lación a la fraternidad con los mismos españoles oprimidos en su propia patria: "Nuestra causa, por otra parte es tan justa, tan favorable al género humano, que no es posible hallar entre las ·otras naciones nin– guna que se cargue dela infamia de combatirnos, ó que, renunciando á sus intereses particulares, ose contradecir los deseos generales en fa– vor de nuestra libertad. El Español sabio y virtuoso, que gime en si– lencio dela opresión de su patria, aplaudiTá en su corazón nuestra em– presa. Se verá renacer la gloria nacional en un imperio inmenso, con– vertido en asilo seguro para todos los Españoles que ademas dela hos– pitalidad fraternal, que siempre han hallad~ al~i,_ podran _respirar _li– bremente bajo las leyes de la razon y de la JUSticia. Plugiese a Dios que este día, el mas dichoso que habra amanecido ja~as no digo pa~a la America, sino para el mundo entero: plugi~se a Dios que llegue sm dilación! Quando a los horrores de la opres10n y de_la crueldad su– ceda el reino de la razón, de la justicia, dela hum~mdad: quando el temor, las angustias y los gemidos de diez y ocho m1llon~s de .~ombres ha.gan lugar á la confianza mutua, ala mas r.ranca sat1sfacc10n y al gozo mas puro delos beneficios del criador, cu10 nombre no se emplee mas en disfrazar el robo, la fraude y la ferocid ad: quando s~an echa– dos por tierra los odiosos obstáculos que el ego1s~o mas insensato, opone al bienestar de todo el género humano, sacnf1cando sus verda– deros intereses al placer barbara de impediT el bien ajeno;. que ª&ra– dable y sensible espectáculo presentaran las ~ostas de Amenca~ cubier– tas de hombres de todas las naciones, cambiando las producciones de sus payses por las nuestras! Quantos, huy:ndo d: la opresión, ó d.e la. miseria, vendran a enriquecernos ~~n su ~r: dustna con sus conoc1- m1entos y á reparar nuestra poblac10n deb1htada! De esta manera 1 111 p. 35, párrafo 3<? y p. 36 y p. 37, párrafo 1 Q. Hí8 Del abate Viscardo a Monseñor Muzi ... , p. 368.