Los ideólogos: Juan Pablo Viscardo y Guzmán

CXIV CÉSAR PACHECO VÉLEZ América (Madrid, 1941) formula el juicio que luego Tepiten cuantos han estudiado la obra de Viscardo: "]unto con arranques de una emoción que tomaba la forma del es– tudio histórico, veremos la apelación directa a la acción política. fü jesui– ta D. Juan Pablo Viscardo y Guzmán, originario de Arequipa y muerto en Londres al terminar el siglo XVIII, escribió un documento que puede ll'a– marse el Acta de la Independencia de la. Am.érica EspCl!ñola.. Lo mas no– table de este manifiesto es que su autor habla como español atmericano y se dirige a fos españoles americanos para unirlos contra la dominación política de los españoles europeos" l66. Sobre todo ha sido importante el juicio de Pereyra por lo que se re– fiere al testimonio de Viscardo como fundamental para comprender la tesi– tura espiritual de los criollos hispanoamericanos en los pódromos del pro– ceso emancipador. Luego de trascribir algunos pasajes de la Carta, Perey– ra comenta: "Viscardo y Guzmán se engañaba en la perspectiva de los he– chos. Veinticinco años después de la muerte del autor de esta carta, y mas de treinta años después de haber sido escrita, había españoles americanos 'bárbaros instrumentos de la tiranía', combatiendo por el rey contra los 'hermanos inocentes' que prncuraban destruir el régimen tan acervamente criticado por Viscardo y Guzmán. Pero la lealtad al trono de ningún modo significaba unión entre fieles americanos y súbditos peninsulares. Los crio– llos habían manifestado su conciencia de clase desde los días inmediatos a la conquista. Con el tiempo la rivalidad fue aumentando" 167 . Y volviendo al tema de la complejidad de la conciencia histórica criolla, añade Pereyra, utilizando otra vez el testimonio viscardiano: "Vis– cardo y Guzmán, que hablaba en nombre de los conquistadoTes y poblado– res, como descendiente de ellos, acudió a la peligrosa cita de Las Casas. Así se formuló la tesis que iba a ser el centro de la contienda: la raza espa– ñola cruel, rapaz, e incompetente, debe desaparecer de América: el criollo, hijo de español, quiere desespañolizarse; acude para ello a la virtud, a la pericia y a la fuerza de los grandes pueblos. Pasaba en América con todos los extranjeros lo que acaba de suceder en Francia con los norteamerica– nos... La primera [potencia] de quien imploró ayuda fue la Gran Bre– taña" 168 • De esquivo personaje que atraviesa furtivamente por el escenario po– lítico que domina Miranda; de oscuro autoT de un breve alegato que sirve al precursor venezolano como instrumento eficaz en su acción subversiva, y al que se hacen breves referencias en las biografías del gran aventurero caraqueño, pasa a ser Viscardo, después de los juicios consagratorios de Be– cerra y Pereyra, objeto de específica atención. 166 Carlos Pereyra, Breve Historia de América, Madrid, 1940, pp. 464-469. 167 Ibidem. 168 !bid., pp. 489-492.

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