Los ideólogos Toribio Rodríguez de Mendoza

TORIBIO RODRÍGUEZ DE MENDOZA 173 De lo expuesto anteriormente se deduce con claridad, que es– te establecimiento tuvo grandes y rápidos progresos, y que su fa– ma extendida por toda esta América atrajo jóvenes de los puntos más remotos, y que nunca se han visto en esta parte del mundo literatos más instruídos, ni en tanto número. En verdad diaria– mente así han ido renovando las ideas, de modo que puede decirse que el Convictorio ha sido una luz que alumbra a todo este conti– nente. Pero en el día apenas conserva unas débiles luces por fal– ta de pábulo. Es decir un déficit de cerca de seis mil pesos annua– les causado por la suspensión de Tributos, y aunque estos se han restablecido pero no se cuando los llegará a disfrutar, porque las necesidades públicas absuelven más de lo que entran en el Era– rio. Para repasar, o retener la ruina restableciendo el Gobierno el estudio se han nombrado Vice-Rectores interinos, y conserván– dose vacantes sus Cáthedras hasta mejor tiempo. Se ha manda– do por el señor Virrey que reunidas las dotaciones de sus Cáthe– dras se distribuyan en los dichos Vice-Rectores . Por la dedica– ción de algunos Maestros juiciosos estudian los jóvenes, más sien– do estos en muy corto número, el ingreso de este ramo es muy di– minuto, y por eso se les está ministrando alimentos sujetos a las entradas. Estudiosamente se ha dejado tratar de la Librería del Colegio, obsequiada por el Excelentísimo señor Conde de Vista Florida. El primer Bibliotecario único capaz de form r un índice con distribuición de las facultades, fué destinado fuera del Cole– gio, y el que le sucedió apenas pudo formar una lista según el de– sorden con que se recibieron, y colocaron en los estantes, y no ha– biendo otro sujeto a quien confiar el Catálogo de Libros en la for– ma que usía desea, y me previene, es forzoso que yo me tome es– ta pensión, no con la brevedad que quisiera, sino sujeto a las in– disposiciones de mi salud pero con preferencia a toda otra aten– ción. - Dios guarde a Usía muchos años. Real Convictorio de San Carlos, maroz veinte y tres de mil ochocientos diez y seis. - Doc– tor Toribio Rodríguez de Mendoza. - Señor Visitador Regio don Manuel Pardo. Lima, mayo veinte de mil ochocientos diez y seis: Visto este oficio con los documentos que se acompañan pásese al señor Rec– tor del Colegio el oficio acordado . - Pardo. - Elizalde. Excelentísimo Señor. - El doctor don Copia del nombramiento Francisco Pacheco nombrado por Vuexce– de Secretario de Visita lencia Secretario de la Visita de la Univer– sidad, Colegios etcétera, se ha marchado

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