Memorias diarios y crónicas historia de la revolución de la independencia del Perú

HISTORIA DE LA REVOLUCION DE LA INDEPENDENCIA DEL PERU 161 sin duda el rasgo mayor de valentía que se recuerda en su sobresaliente carrera: su bien acreditada serenidad en los peligros superó de mucho en esta ocasion aun los cálculos menos modestos de los partidarios ma adicto-; á su persona. Aunque babia recibido un balazo en un muslo, no hizo ca o de él hasta que se hubo posesionado completamente de su presa i ni aun entonces aplicó otro remedio sino el de ligar la herida fuertemente con un pañuelo. Sentado sobre un cañon i estendiendo su pierna sobre una hamaca, mandó impavidamente la maniobra, i continuó en aquella actitud hasta las tres de la mañana en que pasó á bordo de la O'Higgins. El comandante del bergantin de guerra Pezuela, don Ramon Bañue– los, que hahia podido fugarse de la fragata donde se hallaba accidental– mente al tiempo del ahordage, llegó oportunamente á poner sobre las armas toda su tripulacion, i se debió á sus esfuerzos i actividad asi como á lo del entonces teniente de fragata don Antonio Madroño que mandaba in– terinamente el bergantin M"aipu, fondeado al lado del apresado buque el malogro de los rebeldes que tratáron tamhien de abordar ambas embarca– ciones, habiendo contribuido no poco el vivo fuego que salia de su artillería á hacer d~sistir á los insurgentes de su primitiva idea de llevar e ó quemar todos los buques mercantes á lo menos ya que no les fuera po ibl apode– rarse de los de guerra. Los comandantes i tripulaciones de ambos bergantines e cubrieron de gloria en medio de la fatalidad del destino de la E meralda ; pero brilló todavia de un modo mas recomendable la bizarra defen a que hizo el Maipu contra un gran número de harca que lo atacaron por toda partes, echando algunas de ellas á pique i escarmentando á las dema . E t ra go particular de arrojo i valentía llamó la atencion del virei quien fn ió al dia siguiente 1000 pe o para la tripulacion i lo ma ardiente testimonios de gratitud i aprecio para u digno comandante Madroño. La pérdida de este hermoso i velero buque armado con 40 cañon . perfectamente surtido de jarcia i enseres marítimos, con pro · ion para tres meses i repuestos para dos años, llenó el corazon del vir i del ma · profundo dolor, i exa peró ha ta 1 último grado lo ánimo de los oldad del pueblo contra las tripulacion de la citadas fragata Macedonia , Hiperion, sin cuya coop raci n no par cía po ihl qu e hubi ra 11 ad á efecto con tanta felicidad aqu 1 t merario a alto. Alguno individuo de la prime1·a, qu bajaron imprud ntement á tierra al t r er dia ufrieron los efectos de la irritacion po ular que fueron ontenido m mhar o tan pronto como la autoridad tu av1 o de tamaño Este fin tuvo la fragata m ralda qu lu go fu por los insurj nt s n nm m racion d la onqui ta portante que había sido h cha á prin ipio d año p r llama a aldivía ta plaz rm- 1 almirante ·hrane. La su rt d la Pru ba i nganza, mnndada la rirn ra p r i-

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