Misiones peruanas 1820-1826: misión García del Río-Paroissien

312 MISION GARCIA DEL RIO · PAROISSIEN presumir que en las observaciones que hemos hecho a ese Gobier– no sobre la necesidad de mantener en Europa agentes diplomáti– cos nos guiasen miras personales; en medio del silencio que han guardado con nosotros las diversas administracioneJ que se han sucedido en el Perú, tenemos acerca de los tiros que nos han hecho la calumnia y la maledicencia las noticias suficientes para calcular que nuestros servicios no serán en adelante aceptos a ese país. Por consiguiente no asistiéndonos la esperanza de ser empleados debe considerarse nuestro empeño en aquel punto. Mas como es evidente que cada día se aumentarán los perjuicios que experimen– tamos con la pérdida de nuestro tiempo en Europa, rogamos de nuevo a V. S. que se sirva elevar nuestras reclamaciones al Jfe. Su– premo de la República, y solici1ar órdenes suyas que guíen nuestra conducta. Bien sencillo es lo que nosotros pedimos se decida. Toda la cuestión se reduce a saber terminantemente si es del agrado del Gobierno del Perú que nosotros continuemos representándole en Europa, o no. En el primer caso es necesario se nos trasmitan los poderes y las instrucciones de estilo. En el segundo, solicitamos que se nombre una persona que viniendo completamente autoriza– da para examinar nuestras cuentas, y saldarlas; y con pleno cono– cimiento de las instrucciones que se nos expidieron a nuestra sa– lida del Perú, de los actos de los Gobiernos que sucedieron al que nos comisionó, de los reveses militares ocurridos en ese país, del estado de la Inglaterra respecto a la América en lo político y en lo económico durante la época en que permanecimos en el ejer– cicio de nuestras funciones y de las dificultades que por todas par– tes nos rodeaban, pronuncie, a nombre del Gobierno del Perú jui· cio sobre nuestra conducta: con esto se pondrá un término a nues– tra ansiedad y habiendo llenado nuestros deberes para con ese Es– tado, quedaremos en libertad de obrar según lo que dicten nues– tras circunstancias. Esperamos de la justificación de ese Gobierno que accederá a nuestra súplica; y que por conducto de V. S. nos será trasmiti– da su resolución con la brevedad posible. Tenemos el honor de renovar a V. S. los ~entimientos de la más alta consideración y respeto con que somos, Sus muy obedientes servidores. J. García del Río = Diego Paroissien.

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