Obra Gubernativa y Epistolario de Bolívar El Congreso de Panamá

40 RAUL PORRA BARRENECHEA por Colombia. Los. delegados bolivianos debían cooperar con Jos colombianos, para que se aprobara la propuesta de esta nación, para que los buques de guerra que posean los aliados "se consideren co– mo de la confederación, precediendo el justo precio de ellos para de este modo calcular lo que corresponde a cada estado" en la escuadra federal. Esta claúsula da la idea de la absorción que Co– lombia quería verificar principalmente de las fuerzas navales del Perú. La liga entre los países americanos, sería en primer término defensiva, pero se la autorizaba para emprender expediciones con– t ra Cuba y Puerto Rico y contra la misma España. Bolivia, sujeta a Sucre, tenía que seguir la trayectoria de los sueños bolivarianos. Las instrucciones bolivarianas fueron remitidas por Sucre a Bolívar a fin de que éste las revisara y corrigiera a su arbitrio. Bolívar era, desde antiguo, partidario de una alianza o pro– tección de la Gran Bretaña a los pueblos americanos. Inspirán– dose en sus ideas Colombia invitó a la Gran Bretaña a asistir al Congreso de Panamá. Esta invitación, aunque fuera luego cri– ticada por el propio Bolívar, creía éste que, en el caso de ser aceptada, daría gran relieve al Congreso de Panamá e incitaría 2. entrar en la liga a los países remisos. Se quejaba Bolívar de que la invitación se hubiera hecho pública, porque quería preparar como u n gran golpe teatral la inesperada llegada de los delegados ingleses a Panamá. "Manejada la negociac10n secretamente -decía- quedaba ileso el crédito o recibía un grande esplendor al ver aparecer en el Istmo los diputados británicos y esto hubiera apresurado a los que no hubiesen entrado en la confederación a solicitar su admisión en ella". En febrero de 1827, según unos apuntes del Libertador, encontrados por Lecuna, parece que la idea de una confederación con la Gran Bretaña había llegado a crecer en la mente de Bolívar, hasta convertir, casi a las colonias libertadas en un protectorado británico (44) . Correspondiendo a la invitación colombiana, Canning desig– nó para representar a la Gran Bretaña en el Istmo a D. Edward James Dawkins, el que no intervendría en las discusiones de la pedido. Mr. Dawkins fué así, en el Congreso de Panamá una espe– asamblea, sino que tenía por misión oir los informe que tuvieran a bien comunicarle y ayudaría con su consejo cuando és te fuese (44) V. Lecuna., Documentos referentes a la creación de Bolivia. II, 359.– Carlos Villanueva, -El Imperio de los Andes- Ollendorff.-- Parí , pág. 144.