Obra gubernativa y epistolario de San Martín

100 JOSÉ A. DE LA PUENTE CANDAMO el banco se le hagan en papel ó en metálico como prevenía el re· glamento. Para hacer mas notoria esta cualidad, con otras que recomien– dan el establecimiento, y desvanecer las preocupaciones que puedan oponerse a la idea mas benéfica que se ha proyectado en el Perú, conoce la direccion la necesidad de ilustrar la materia por ser des– conocida en su práctica, y por medio del adjunto aviso convida a la lectura de la obrita que está reimprimiendo con el objeto de fijar la opinion en un asunto tan interesante, si todo mereciese la aproba– ción de V. S. I.- Dios guarde a V. S. I. muchos años. Lima y Enero 24 de 1822.-El conde del Villar de Fu ente. * Todos los economistas convienen en que un banco bien estable– cido causa la felicidad del estado en que se erije: la experiencia con– firma esta asercion en las naciones europeas: y es consiguiente su– ceda lo mismo en las americanas. En aquellas el comercio ha trata– do de duplicar el fondo de su circulacion con signos que represen– tan la moneda: el gobierno ha procurado buscar auxilios en si mis– mo para no solicitarlos de potencia extraña, ni gravar la propia con pensiones: y el interes público consolidando la opinion ha traído el crédito, la utilidad, y el metálico de los vecinos: asi es que procu– rando cada cual su propio provecho, el banco ha venido a ser el medio de prosperar a todos. El Perú imitando su conducta, advierte que su comercio remiso no se puede activar sin un agen te que evite la demora de círculos distantes; que supla la escasez de la moneda menor, insuficiente al giro, y reemplazase la ext raccion de la mayor, creando signos que dupliquen el caudal existente. El gobierno exausto de fondos, pre– cisado a gastos, y distante de las potencias prestamistas, conoce que el adeudarse consigo mismo es me jor que gravar directamente el caudal de sus miembros. Estos por conservar con el estado sus for– tunas, evitan la contribucion con una fianza nomin al que garantiza el crédito público; y he aquí formado el banco auxiliar del Perú con el caracter benefactor de un monte-pio, que cada año se renue– va en el grado de poder que se necesita : en efecto: el banco va a ser el agente económico y seguro para t rasladar los caudales sin de– moras ni r iesgos por todo el reyno, introduciendo en papel-moneda un ingent e caudal que no existía, va a activar la circulacion mer– cantil, a habilitar la miseria, y a fomentar la agr icultura y las artes, supliendo este caudal para auxilio de todos l os objetos útiles ima– ginables.

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