Periódicos: El Pacificador, El Triunfo de la Nación, El Americano, Los Andes Libres, El Sol del Perú

juz<raron dignos de dar á la prefüa, no lo merecen ménos, el oficio ó car– ta <le atcncion con que se aoompaíia– ron los cxe1nplares, los dictarnenes de los SC'ÍÍores síHdicos, y cualquiera resol11cion <lcl exc mo. ayuntarnieuto sobre este particular; ;muque 110 fue– se con ot1!9 fin que calmar la curio– sidad. Yo creo que de este modo, tal vez, no faltaria alg·un buen ?iudada– no que adelantase el pensamiento re– ferido: como hasta ahora nada s~ nos ha comunicado sobre los trámites de este suceso, suplico á V. se sirva in– sertar esta ocurrencia por lo que pu– diese conducir al efecto indicado. Es de V. S. S. S. El procurador de los curiosos. TEATROS. Llamada la atencion pública por los graves asuntos que se han estado deliberando, y de los cuales depen– de que los españoles formen una na– cion de hombres libres ·y ventuttlsos, los redactores del V'ltiversal se hau visto hasta ahora forzados a llenar la mayor parte de las columnas de su periódico con las sesiones · de las córtes. Tributar al co,ngreso los ho– nores de la preeminenCia, era tina ae las primeras obligaciones en que co– mo periodistas se han constituido: (>bligacion grata para cuantos llevan en su alma el apego de la ilustracion y de las prosperidade's nacionales. La Europa atónita nos -contempla, y se 'con\rence de que querernós y pode– mos ser libres: idea casi perdida por las calamidades pasadas, y que ya ·dichosamente desaparecen en medio de los tt-iunfos de nuestra regenera· cion política. ¿Qué duda puede que– dar de que esta heróica España, tan caJtminiada y deprimida, encierra en su seno muchos y dignísimos ciuda– danos , capaces de nivelarla en civi– lizacion con las naciones tenidas por mas cultas? Y así será, sin duda; porque en los españoles hay cuantó puede necesitarse para entender la libertad y apreciar su bénefica in.– fluencia. La España g·oza de una ad– mirable situacion geográfica, de un clima delicioso, de un suelo feraz: el carácter de sus habitantes es no- ble, r~flex1vo, prudente, constante.... . ;,Qué les ha faltado hasta ahora..... ? La ocasion (y nada mas) de poderse aprovechar de las numerosas ventajas que les repartió la naturaleza. 176 La.s grandes cuestiones que se han agitado en el congTeso, han si– do, pues , la causa de haberse dife– rido en el Universal la insercion de muchos artículos anunciados en el prospecto. Ocupa entre ellos -el de 1eatros un lugar preeminente; por– que los teatros son á veces un ter– mómetro de la tivilizacion de las na– ciones, como dixo nuestro político Saave<lra. Pero delante de los gran– des astros se pierden y haeen páli– dos los pequeños. Las cuestiones de la política absorven la atencion, y todo cede á la importancia de los intereses sociales. Cuando la discu– sion de lo que mas importa a los hombres es pública y libre, todo lo que en épocas de oscuridad y s~r­ vidumbr.e alimentaba esclusivameR· te su entretenirniento, se hace infe– rior al prestigio de las nuevas insti– tuciones, y al movimiento con que e!St~ nue.n~. vida debe embellecerse y ensan<::harse. Los te~tros, en medio de lo! ele– vados asuntos del día, han seguido su carrera con perezoso abandono. Los objetos de pura diversion han sido en estas primeras .y gr~ndes r~ presentaciones del g·obierno consti– tucional, lo que una sirvienta desa... liñada y vetusta es al la.do de una ama jóven , elegante, adormida con todos los atributos de las gracias se– ductoras. Pero el teatro , que como aca-. bamos de decir, ofrece muchas ve– ces un .~nuncio claro y perceptible. de l.os progresos de la civilizacion, no puede ser , cuando todo se rege... 11era y. refunde, un objeto descuida– do y despreciable. El teatro es entre todas las diversiones la que mas afi– na y ameniza las costumbres, la que mas ennoblece la parte posible de la perfectibilidad social. Combinar con el desaqogo la instruccion y el cas– tigo de los errores, es un descubri– miento, al paso que festivo y de jo– vial pasatiempo, sumamente impor– tante y clásico en la historia progTe· siva del entendimiento humano. Es.. cuela es el teatro de urbanidad , de elegancia, de lengua(J'e y de virtu.. des. De virtudes, porque la buena comedia es el azote de los vicios, y porque la trag·edia representa el de los grandes crímenes. Si Talía, en.. tra':ldo en los ponnenores de la vida ~oc1al,, conige con festivo donaire

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