Periódicos: El Pacificador, El Triunfo de la Nación, El Americano, Los Andes Libres, El Sol del Perú

2 Rusia Jos acepilláron bien, y les pro· curaron la.s comodiJ.actes que disfrutan. l>regunte á los francest>s. •.• pero no, dispense V., se me habia pasí.'do que DO quiere nada de por allá ni ~-zun las doctrinas. No riñamos por eso : con· traigámonos á nudcra Améric¿t. De– mos, si le parece un vistazo á los .cam– pos' eliseos de nuestro emisferio. .V ea– Dlo~ los ·Estados-Unidos·, pero esto es <>bra larga. Una ojeada rápida á la pro– •incia de New-Yock: la Nueva Roche– .la y sus inmediaciones manifiestan las l'iquezas debidas al ingenio de los fran– ceses, que con motivo de la revoca– ciem del edicto de Nantes , abandona'· roo su amada Galia. Las preciosida– des de la parte occidental de la isla .ele Nassau , son obra de los ftamencos. La~ ricas campiñas dd Rio Paltz efec– to de la industriosa perseverancia de µnos naturales del P::\latinado y de va– rios holandeses. Ay, amigo, si escuvié· ramo~ despacio quantos testimonios de mi verdad le enseñaría en aquella re– pública l ¡Cómo le haría observar la al– gazara con que grita toda ella , ;gracias á las guerras .~angrientas que en los si· glos 15 y 16 afligieron la Francia, Alemania, H0landa, Inglaterra y otros paises, qµe obligando á mm;hos euro– peos á huir de sus hogares, vinieron aqui á buscar una nm~va patria, donde desplegaron lus resortes de su indus.. tria y energia ! ¡Cómo le ha ria ver las brillantes marc;as que por todas partes ha gravado la hacha, el arado, el com– pas, la imprenta y de mas instrumen– ·tos que llcv.. uon allá los dt! la otra ban– da! y no dude que su progreso pos– terior á W ashigton es debido, segun la opioion d~ los políticos , á las sábias leyes dd conS{reso federativo que atrae de mil modos á los hombres útiles de ·las demas naciones. Si no anduviéramos tan aprisa, ; quántos reynos veriamos que deben .sus comodidades , luxo y representa– cion á la vecindad! ¡ Pubre Grecia, que despreciada hubieras sido sin las luces y auxilio de ciertos orientales que .se avecindaron en tí! z Cree V. que sin esto vedamos en ninguna tabla crono– lógica á aqutllos esparciatas y atenien- 5es que meten tanta bulla en la his– toria l No, SeñQl, es rc;¡ular que ta· davia comiesen vellota~. Amigo, mu– cho barro quesa á mano, pero esto Y'' Ya largo para papel comunicado , 1 todavia nada hemos hablado de rnatti– monio e hijQS! dexémoslo para otro dia que este de vagar, en que nos contr.u:– remos á los españoles europeos avecin– dados en la España Americ~na. Algo diré entónces de la. hospitalidad \mica gr:tcia que V. les concede -en el número ~ y 3, y algo tambien del orgullo, elacion, ideas f antáticas, y otras pre– seas .con que V. los· engalana, y me despi~o con esta pregumilla. En la úl· tima· invasion francesa de nuestra Pe• nínsula ~ i quiénes en su opinion de V. han manifestado patriótismo mas acen· drado, OFarrill, Mazarredo, Morla y Negrece ·; ó Reding, Coupigni, Es· paña y P~nne ~ Si V. es tan ingéouo como aquel doctor de la parábola, que en calidad de pró~irno prefirió el sa– maritano al .sacerdote . y levita , dirá que los quatro últimos. Pues sepa V., por si acaso lo ignora , que los qu~tr<> primeros nacieron , comieron y eogor• daron bien en las Españas, y los úki• mos no tienen en ellas mas que ve<:in• dad, porque uno es helvético, otro etrusco, y los dos ultimos moosleurct con su peluca empolvada. Es de V. señor editor del presente, su muy atento S. S. Q. B. S. M. El Español. SR. EmTolt. =Estimaré á V. inser• te en su inapreciable perió~ico I". vistll fiscal que acompaño, para que. sirva dt ilustracion lll artículo del amigo de la equidad y de la justicia, que se halltJ estampado en el suplemento r1Úmero 12: J' protesto no dexar Ja pluma de la m•· no, r10 solo para quejarme del ate?~ª· do cometido con mi compañero, uno tambim contra todos Jos ·'lue contt'ibu• Jlan á entorpecer. el curso de · est• 'aus,d hasta su conclusion. Vista fiscal.= El fiscal de est~ ca– pitanía gtneral vista esta· sumaria ac• tuada á solicitud del distinguido de la Concordia don Donato Alday por que· rella interpuesta contra su capican doti Ramon Vendrcll dice: que eQ ella apa· rece una plena justificacion de los sa·. blazos que le dió , de cuya resulta fu4 herido en circunstancias de hacerse el relevo del deita-camcoto de eatc ~rp<> 60