Primer Congreso Constituyente

ACTAS DE LAS SESIONES PUBLICAS 127 hiendo ocurrido igualmente duda sobre si la discusión sería pública 6 secreta, se resolvió por el segundo extremo. Se leyó el informe de la Comision de Justicia y el voto parti– cular del Sr. La Hermosa en orden a Ja suprecion del juzgado de secuestros. Esta opinó, Primero: Que despues de jurada Ja Constitu– cion han quedado extinguidos todos los juzgados privativos, y el dt• secuestros no solo ha debido terminar sus funciones contenciosas, pues el artículo noventa y seis no conoce otros jueces que Jos establecidos por ella, sino que debe contraerse unicamente a pasar todas las cau– sas pendientes a los respectivos juzgados de primera instancia, donde han de continuarse. Segundo: que dicho juzgado debe tratar de po– ner expedida la cuenta jeneral del ramo para su respectiva glosa por la Contaduría Mayor: y asi mismo un estado jeneral que ha de pa– sarse al Congreso y publicarse, en el cual se individualisen los se– cuestros y confiscaciones de toda clase que se haya hecho, sus pro– ductos, gastos, e inversiones, con referencia a las ordenes comunicadas; todo lo que avisará el Gobierno librando las correspondientes ordenes y avisando succesivamente los resultados. Declarado el punto suficiente– mente discutido despues de un largo debate, se votó por puntos, y aprobada la primera, se mandó que vuelva la otra a la Comision, para que con arreglo a ella presente el respectivo proyecto de De– creto. Se levantó la sesion pública, y quedó el Congreso en secreta. J. Arrese Diputado Secretario SESION DEL DIA 3 DE ENERO DE 1824 Leida y aprobada el acta anterior, hallandose presentes treinta y nueve señores, se dió cuenta de la nota dirijida por el Presidente de la República, avisando haber nombrado General en Jefe del ejercito del Perú al Sr. Diputado Gran Mariscal Don José de La Mar, por concurrir en su persona cuantas cualidades puedan apetecerse para el expresado mando. Asi mismo manifiesta la necesidad de que el Sr. La Mar salga para Trujillo, donde es muy necesaria su asistencia, y espera que una y otra disposición sean del agrado del Congreso. En consecuencia de todo, se aprobó el nombramiento de General en Jefe del ejercito peruano conferido al Sr. La Mar, a quien se con– cedió la licencia respectiva para que pueda trasladarse a Trujillo a

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