Primer Congreso Constituyente

140 PRIMER CONGRESO CONSTITUYENTE Se vió el dictamen de la Comisión de premios en el expediente de Doña Francisca Caballero que pretende se le dé por la represen– tación nacional una vivienda en los Monasterios de esta Ciudad, y se le asigne una pensión con que poder subsistir en remuneración de los servicios patrioticos que refiere. La Comisión opinó: "que se or– dene al Poder ejecutivo le proporcione una habitación en cualquiera de los Monasterios de esta Ciudad, ó en la casa de los pobres para que viva en ella; y respecto a que el estado actual de sus rentas y del tesoro público no permite que aquellas ni este le alimenten, se le señale la pención de veinte y cinco pesos mensuales despues de concluída la guerra". Previo un ligero debate, y declarado el punto bastantemente discutido se votó el dictamen de la Comisión y fué aprobada la primera parte sostituyéndole la palabra beaterios a la de Monasterios, y la segunda fué desechada. Inmediatamente se leyó un recurso de Jos Jueces de derecho quejándose de la providencia de la Alta Cámara de Justicia, que manda á los Escribanos no actuen con ellos porque se les supone despojados de unos destinos que deben desempeñar, segun el Soberano decreto de diez y nueve de Agosto del año próximo pasado, que or– denó no se formase cauza á los que no emigraron siempre que con actos positivos no hubiesen obrado contra la independencia de la Re– pública, en cuyo caso dicen hallarse. Se mandó: "informe el Gobierno". El Sr. La Mar llamó la atención del Congreso y dijo: Señor: "Pronto ya para marchar a Trujillo, me present!? en cumplimiento de "mi deber á recibir las soberanas ordenes del Congreso, cuyas altas vu– "tudes y notorios grandes sacrificios por la independencia me envane– "cen ciertamente de haber sido uno de sus miembros, aunque sin las '1uces y talentos correspondientes. "Mi destino de ir a encargarme de la división del Norte, Y de "organizar los cuerpos que formaron la última desgraciada expedición "sobre Intermedios, es muy superior a los conocimientos militares que "se me suponen: sin embargo, yo debo obedecer, congratulándome me– "nos de mandar como General, que de servir como soldado para sa– "tisfacer de algun modo las ardientes votos que me animan en de– "fensa de la patria, de esta patria, cuyo nombre solo debe transpor– "tar al campo de batalla á todo americano. "Esta consideración, señor, unida á la justicia de la causa que "sostenemos protejida visiblemente por el Todopoderoso, y la confianza "de servir á las ordenes del Genio de la América, del Guerrero Bo– "lívar, alienta mi corazón con esperanza segura de que muy en bre– "ve triunfarán decisivamente nuestras armas.